Crisis hace que fraternos se hagan cargo de Urkupiña
La crisis municipal que atraviesa Quillacollo comienza a afectar al desarrollo de la festividad de la Virgen de Urkupiña. Ayer la segunda promesa se realizó sin la participación del alcalde suplente, Willy López (FPV), ni de los concejales, debido a que los fraternos no los invitaron.
Sólo el secretario de Desarrollo Humano de la Alcaldía, Marco Prado, y el director de Cultura, Pablo Hinojosa, acompañaron el recorrido.
“No han dejado ninguna invitación, ese ha sido el motivo fundamental por el que no hemos asistido”, expresó el presidente del Concejo Municipal, René Fernández (Demócrata).
El presidente de los fraternos, René Valdez, dijo que no entregaron las invitaciones porque en el periodo que debían hacerlo los legisladores cambiaron de alcalde. Remarcó que esta situación influyó para que la asociación opte por continuar sus actividades sin tomar en cuenta en las autoridades locales.
“Esto es el preámbulo de lo que va a ser el día 14 y 15 de agosto que permite a la población apreciar a las fraternidades con la integridad de los componentes”, señaló.
Estimó que 40 mil danzarines y 15 mil músicos asistieron a la última promesa y calculó que para los días centrales de la celebración se tendrán 60 mil bailarines y 20 mil integrantes en las bandas.
Los comerciantes tomaron las vías aledañas a la plaza Bolívar, pese a que la Intendencia Municipal desplazó personal.
El comercio y el caos vehicular se apoderaron de varias calles del centro histórico de la ciudad de la integración, debido a que los vendedores rebasaron el control de los gendarmes y de los policías.
Fernández comentó que con la finalidad de evitar esta situación en una reunión del comité interinstitucional que organiza la festividad, el intendente Alfredo Guzmán adelantó que enviará en próximos días solicitudes para que se autorice la contratación de más personal.
“El pasado viernes hemos firmado un convenio para poder organizar brigadas de apoyo”, aseveró el presidente del órgano deliberante.
Este documento permitirá que funcionarios de Urbanismo y Catastro apoyen algunos controles. Asimismo, anunció que deben aprobar una nueva norma para actualizar los precios de graderías y sillas.
CÁMARAS RECIBEN MANTENIMIENTO
Pese a que en abril se anunció la compra de 50 nuevas cámaras de vigilancia para reforzar el plan de seguridad de la fiesta de Urkupiña, la semana pasada la Alcaldía comunicó que sólo se hará el mantenimiento a los equipos existentes.
El 15 de julio el Comando Regional de Quillacollo hizo conocer que sólo cuatro de 97 artefactos instalados en centro urbano funcionaban. Desde el Ejecutivo municipal informaron que se está dando celeridad a este tema y que los equipos funcionarán antes de la festividad.
Por otro lado, el presidente de la Asociación de Fraternidades, René Valdez, informó que instalaron 17 cámaras en la ruta para controlar a los bailarines y mencionó que tienen su propio centro de monitoreo.
Las cámaras forman parte del plan de seguridad que ejecutará el Comando Departamental para resguardar la vida de los visitantes y prevenir hechos delictivos.
La Alcaldía prioriza de momento la promoción de la festividad en el interior de país.