Los vecinos de Cotapachi ven inviable hacer relleno sanitario en Quillacollo
Pobladores de Cotapachi se declararon en estado de emergencia tras conocer que el alcalde suplente de Quillacollo, Héctor Montaño (FPV), visitó el botadero con la intención de invitar a empresas para la implementación de un relleno sanitario.
“Nadie nos invitó a la inspección. Hay compromisos pendientes que no fueron atendidos. Las autoridades municipales tienen conocimiento que el convenio para depositar basura en Cotapachi vence el 31 de diciembre de 2019”, informó ayer el presidente de la comunidad, Bernardo Almaraz.
Sostuvo que la propuesta de industrializar los residuos sólidos es inviable por falta de recursos económicos y terrenos.
“Desde el 1 de enero de 2020, la Alcaldía tiene que empezar a trabajar en el cierre técnico y en la arborización del botadero”, mencionó.
Almaraz dijo que los vecinos del sector están cansados de escuchar intensiones de solución al problema de la basura, pero sin resultados concretos.
Desde el 2017 en reiteradas oportunidades los comunarios bloquearon el ingreso al vertedero para exigir el mantenimiento y asfaltado de la vía Cotapachi-Caico, empero no tuvieron éxito. La inversión que se requiere para ejecutar la obra es de 17 millones de bolivianos.
El pasado miércoles el alcalde suplente anunció que convocará a representantes de industrias interesadas en industrializar las 90 toneladas de desechos que genera Quillacollo.
“La propuesta es suscribir un comodato con empresas extranjeras para que coloquen maquinaria y tecnología. La Alcaldía garantizará un terreno de nueve hectáreas”, concluyó.