Iglesia denuncia que se intenta “ocultar” delitos
El arzobispo de Santa Cruz, Sergio Gualberti, en la misa de Domingo de Ramos, pidió ayer “una investigación imparcial, objetiva y libre de presión” de los casos de supuesto tráfico de influencias y corrupción. “En el intento de ocultar hechos reñidos con la ley, se difunden declaraciones contradictorias”, dijo.
Gualberti hizo esta reflexión en la Catedral de la ciudad de Santa Cruz ante la presencia de una multitud de feligreses que participó de la celebración eucarística. “Cada día los medios de comunicación nos presentan noticias de personas que se aprovechan del poder para enriquecerse, recurriendo incluso a la corrupción, el tráfico de influencias, la mentira y el engaño. En el intento de ocultar hechos reñidos con la ley, se difunden declaraciones contradictorias y ambiguas que, en vez de hacer luz sobre los hechos, enredan más la situación y confunden a la opinión pública, como si se quisiera distraer la atención del verdadero problema”, señaló.
Dijo que “hay necesidad de verdad y que la justicia haga una investigación imparcial, objetiva y libre de toda presión. Sólo en la verdad se supera el clima de desconfianza y la falta de credibilidad que provocan estos hechos y que amenazan la convivencia pacífica y el Estado de derecho en una nación”.
El arzobispo no precisó de qué caso estaba hablando ni mencionó ningún nombre, pero según señala un comunicado de la Oficina de Prensa de la Arquidiócesis de Santa Cruz, estas palabras hacen referencia al “escándalo de corrupción, tráfico de influencias, mentiras y engaños que envuelven a altas esferas del Gobierno”.
No obstante, el país está envuelto en noticias vinculadas al caso de Gabriela Zapata, la expareja del presidente Evo Morales, hoy detenida por presunto enriquecimiento ilícito y uso indebido de influencias.