Kathy "la Hermosa" encarna el poder de la mujer aimara en los cuadriláteros de Bolivia
La cholita luchadora Kathy "la Hermosa" combina cada semana su pasión por la lucha libre y la educación infantil. Describe el orgullo que siente al subir al cuadrilátero vistiendo una pollera y sombrero bombín, para así demostrar el poder de la mujer aimara de Bolivia ante el público local y extranjero.
En una entrevista con EFE, la atleta habló sobre su carrera en la lucha libre, del espectáculo de las "cholitas luchadoras" y del orgullo de representar a las mujeres que pelean luciendo la tradicional vestimenta de las cholas bolivianas.
Kathy estudió Educación Diferencial, así que de lunes a viernes trabaja con niños a los que ayuda a optimizar su potencial y los domingos se faja la pollera para pelear contra otras cholitas en los coliseos deportivos de la ciudad El Alto, a más de 4.000 metros sobre el nivel del mar.
La lucha más reciente de Kathy "la Hermosa" fue contra Elizabeth "la Roba Corazones", una cholita ruda que personifica a la villana en las peleas.
"La Hermosa", con más de 9 años de experiencia en la lucha libre, salió al cuadrilátero bailando con una canción folclórica de fondo, bajó de una pequeña pasarela que conectaba con el escenario de la lucha y levantó de sus asientos a algunos asistentes para bailar al ritmo de las palmas del resto del público.
Desde el inicio de la pelea el árbitro se puso en su contra, así que Kathy peleó en desventaja, dos contra una, siendo ella la luchadora técnica, la heroína del espectáculo.
Durante el encuentro Elizabeth 'la Roba Corazones' echó mano de su repertorio de trampas, incluso pisando la cara de Kathy "la Hermosa" ante la indiferencia del árbitro y la indignación de los asistentes.
El clímax de la pelea dominguera llegó cuando las cholitas descendieron a la gradería y se mezclaron con el público, allí "la Roba Corazones" golpeó a "la Hermosa" con un contenedor de basura en la espalda, mientras el árbitro la mordía en la mano izquierda.
Después de casi media hora de castigos, Kathy recobró fuerzas por los vítores de los asistentes, con movimientos aéreos y llaves de lucha logró la victoria.
Mujeres luchadoras
"Las cholitas luchadoras" son una de las atracciones principales de las tardes de domingo en El Alto, en donde decenas de extranjeros y locales siguen los golpes y acrobacias de las atletas, que en ocasiones también pelean contra hombres.
Kathy contó a EFE que las mujeres incursionaron en este deporte espectáculo en los años noventa, "sólo había dos o cuatro mujeres peleando, de ahí salieron dos que decidieron pelear por primera vez con pollera como cholitas, abrieron el paso a las demás".
Por esto, una de las cosas que más le gustan de su deporte, es demostrar a las niñas la fuerza de las mujeres, "muchos dicen que las niñas no pueden opinar o que deben estar calladas, las cholitas demostramos lo contrario todos los días", argumentó.
Sin embargo, para ella no importa el papel que desempeñe en el cuadrilátero, "rudas o técnicas, nosotras no sabemos de derrotas, porque las mujeres bolivianas luchamos día a día", sentenció.
"Tuve que entrenar dos años antes de pisar la lona, para estar en forma y la altura", afirmó.
La aficionada número uno de Kathy es su prima más pequeña, "desde que nació la llevan a verme pelear, es quien más aplaude cuando estoy luchando", mencionó sonriendo la luchadora.
La atleta sufrió varias lesiones en el pasado, "la gente no lo cree, pero los golpes son cien por ciento reales". Recordó que su peor lesión fue durante una gira en Perú, un luchador rudo la golpeó con una caja de madera en la cabeza, lo que le provocó una lesión que la dejó sin pelear varios meses.
Sin embargo, esta semana la pelea terminó como le gusta a Kathy "la Hermosa", con ella levantando los brazos en señal de victoria, su rival tendida en la lona y el público coreando su nombre y aplaudiendo de pie.
