Llevarán 36 árboles de la Uyuni a dos parques, pero con control ambiental
La Alcaldía de Cochabamba llevará 36 árboles, entre fresnos, molles y un jacarandá de la avenida Uyuni a los parques del Arquitecto y Jorge Trigo Andia, pero bajo estrictas medidas ambientales para continuar con las obras de la segunda fase del corredor Quintanilla.
El trasplante de 33 fresnos, dos molles y un jacarandá estará a cargo de la empresa RBA Soluciones Ambientales, contratada por la constructora Imesapi-POC, que construye el corredor Quintanilla, desde 2017.
El traslado está bajo la supervisión del ingeniero forestal y arborista del Perú, Guillermo Gonzales, que ayer comenzó a orientar la primera extracción.
“Se está haciendo el trasplante técnico de árboles con un procedimiento que garantiza la supervivencia de la mayoría de ellos, para garantizar eso, se ha hecho una excavación a los costados y cortes limpios para llevar el mayor volumen de raíces y asegurar su prendimiento”, dijo Gonzales.
Además, el ingeniero forestal indicó que con esta técnica se garantiza que el 90 por ciento de los árboles que serán trasplantados sobreviva.
“Estos árboles al crecer en una berma central y con poco mantenimiento tienen un sistema de raíces que ha profundizado más, hay algunas que han profundizado hasta casi dos metros y eso es por influencia del río (Rocha) que está al lado”, añadió.
Al respecto, la responsable de la Unidad Forestal de la Alcaldía, Karen Córdoba, señaló que este trabajo de trasplante se lo realizará entre 30 y 40 días.
“Son más de 24 horas para el primer trasplante, porque, primero se hizo la poda de sanidad para que el árbol no use su energía en ramas secas que no le sirven, de manera que use toda su energía en mantenerse viva durante el traslado”, dijo Córdoba.
Asimismo, indicó que luego del trasplante los árboles recibirán microorganismos, fertilizantes, riego y se hará un monitoreo individual de cada uno de ellos.
Diseño final
Con el trasplante de 36 árboles, también empieza la segunda fase del corredor que contempla la construcción de un desnivel en la avenida Uyuni, entre la calle Miguel de Aguirre y el puente Recoleta, para conectar con el puente elevado que quedó sobre el río Rocha.
Sin embargo, aún no se conoce el diseño final de este proyecto, por lo cual algunos vecinos expresaron su malestar.
“Estábamos muy esperanzados de que con el nuevo Alcaldada se presente el proyecto de manera pública y no a espaldas de la población. No sabemos cuál es proyecto final”, dijo un vecino, Emilio Padilla.
El secretario municipal de Infraestructura, Gustavo Navia, señaló que sí se tiene aprobado el diseño final “porque si no no se tendría la licencia ambiental”, y que en los siguientes días el alcalde Manfred Reyes Villa lo hará conocer a la población.
En abril, uno de los representantes de la empresa Imesapi POC, Mauricio Gumucio, señaló que el diseño final del corredor se hizo a medias en la gestión de José María Leyes y sin un estudio de suelo adecuado.
Además, que el corredor no contaba con una solución vial en el lado norte de la avenida Uyuni. Sin embargo, ayer durante el trasplante de los árboles Gumucio evitó hablar al respecto.
Auditoría al corredor no avanza
Ante las irregularidades e improvisación de corredor, los concejales salientes pidieron realizar tres auditorías.
Pidieron auditar la etapa de preinversión, el estudio a diseño final y la licitación. Sin embargo, la nueva gestión no ha dio inicio a esta fiscalización.
La concejala Marcela Vidaurre, de Súmate, indicó que se pidió una auditoría al proceso de adjudicación y que se envió la nota al responsable de esta unidad, sin embargo, el fallecimiento del responsable de esta área freno este control.
La obra se inició en la gestión del exalcalde de Cochabamba José María Leyes en 2017 con una inversión inicial de Bs 97,2 millones, sin embargo, con cinco contratos modificatorios pasó a más de Bs 106 millones.