Casas invaden la franja del río Taquiña hasta convertirlo en un canal
La franja de seguridad del río Taquiña, donde ocurrieron dos aluviones, está invadida en varios sectores de construcciones, especialmente desde la avenida Ecológica de Tiquipaya hasta la zona de Challancalle en Cercado, según se constató en un recorrido realizado ayer.
La cercanía de las casas con el río provoca que el cauce se convierta en un canal, que impide que el agua y la mazamorra fluyan cuando aumenta el caudal.
Además, se verificó que algunas construcciones eliminaron por completo la franja de seguridad.
Los vecinos de Rumi Mayu, San Gabriel, San Rafael y otros de Coña Coña en Cercado están preocupados de que la intersección de la Challancalle se desvía unos 90 grados y provoca daños como el de la pasada semana.
Una vecina de la parte baja del río, Rosemary, comentó: “Algunos vecinos por querer ganar espacio en su terreno colocaron plantas en medio del río, eso puede causar desbordes si vuelve a llegar la mazamorra”.
Atentado
El exdirector del Servicio Departamental de Cuencas de la Gobernación de Cochabamba y que fue parte del Programa de Manejo Integral de Cuencas (Promic), Omar Vargas, señaló que hay zonas donde los propietarios “incluso cerraron la franja de seguridad” y, por tanto, se apropiaron de ésta.
“Es un riesgo porque puede llegar una palizada y puede desbordar, como ya ha ocurrido en esas zonas. El municipio tiene que liberar esos sitios que no dejan pasar ni la maquinaria. En su momento nosotros, como Promic, hicimos estudios de franjas y entregamos a los municipios, lamentablemente, no hicieron caso”, recordó.
Añadió: “Desde la fábrica Taquiña hasta el puente de la Circunvalación la franja debería estar en unos 100 metros. Del puente hasta la avenida Ecológica, a unos 70. Desde la Ecológica hacía abajo mínimo unos 30, pero no se cumple”.
“Las franjas de seguridad se constituyen en zonas de amortiguación de las crecidas de ríos para proteger a la población de las riadas que puedan generar las intensas lluvias”, explicó.
Propuesta
En tanto, la secretaria de la Madre Tierra de la Gobernación, Maricela Rodríguez, y el proyecto de Adaptación a los Impactos del Cambio Climático en Recursos Hídricos en los Andes (Aicca) Bolivia presentaron ayer la “Guía departamental de delimitación de franjas de seguridad en ríos, incorporando factores de variabilidad y cambio climático”.
“Hoy estamos tocando un tema importante que son las franjas de seguridad. Sabemos que en Cochabamba tenemos problemas con inundaciones y desbordes de ríos y como municipios tenemos que ser responsables”, pidió.
El documento presenta dos metodologías para definir el área de crecida del río o zona vulnerable a inundación y así establecer el espacio sin asentamientos humanos con el fin de prevenir desastres.
La Gobernación verificó el fin de semana que casi el 50 por ciento de las obras hidráulicas de tres cuencas de Tiquipaya están dañadas. Por tanto, planteó trabajar en un plan de contención con participación de otros municipios.
Más torrenteras
Las torrenteras del municipio de Cercado también preocupan a los vecinos y exfuncionarios del manejo de cuencas.
Por ejemplo, la Pajcha, Cantarrana, Aranjuez y Pintumayu están colmadas de material de poda y escombros que pueden generar palizadas, explicó Vargas.
“Estas ramas pueden depositarse en algunos sectores como diques, eso genera la palizada. Es un riesgo y puede desbordar cuencas”, añadió.
Afirmó: “Me preocupa la torrentera Pajcha, en el Cercado. Se está reactivando, igual, que la torrentera Pintumayu y con las lluvias intensas puede ocasionar problemas”.
En otros municipios del eje también generan preocupación los ríos Chijllawiri, La Llave, Pairumani, Chocaya y Huayculi.