Rechazan traslado de albergue Sonrisa a edificación precaria
Los voluntarios del Movimiento Sonrisa rechazan el traslado del albergue, que todavía funciona en ambientes del antiguo hospital Viedma, a uno precario.
Este predio será rehabilitado y, antes del inicio de las obras, la Gobernación desalojó gradualmente a las instituciones que funcionaban en su interior, como el Centro Departamental de Vigilancia de Referencia (Cedevir), la Asociación del Adulto Mayor y ahora es el turno del albergue Sonrisa.
La voluntaria Cintya Lejsek indicó que la Gobernación les ofreció dos espacios: uno en ambientes de la capilla, que está al frente, y el otro en una casa, pero con la condición de que paguen alquiler. En el caso de la capilla, dijo que el tamaño es pequeño y no cuenta con baños, ventanas ni servicios básicos.
En cuanto a la otra casa, afirmó que no cuentan con recursos económicos para pagar, porque se trata de obras caritativas y no de lucro.
“¿Cómo vamos a pagar alquiler cuando nosotros sólo somos voluntarios? No lucramos con esto, sólo ayudamos a personas que realmente lo necesitan, nosotros conseguimos los alimentos porque son centenares de familias que llegan este lugar”, aseveró
Este espacio lleva más de dos décadas acogiendo a padres de niños internados, especialmente a aquellos que viven en áreas rurales. Lejsek dijo que cada año suelen visitar alrededor de 5 mil personas, gran parte son del trópico de Cochabamba.
Este lugar tiene espacio para 22 personas por noche, una cocina, baños, un horno y un comedor común. Lejsek indicó que los voluntarios son los que se encargan de conseguir comida y otros materiales para que las personas estén cómodas.
Respecto al antiguo hospital Viedma, el secretario general de la Gobernación, José De la Fuente, dijo que los ambientes serán utilizados para el traslado del hospital del niño Manuel Ascencio Villarroel.
Anunció que se elabora un Informe Técnico de Condiciones Previas (ITCP) para hacer la rehabilitación de la infraestructura y posteriormente seguirá la licitación para el inicio de obras.
Antes de su intervención, también debe hacerse un estudio previo debido a que es una infraestructura patrimonial.
De la Fuente cuestionó la petición de los sectores. “El hospital no es lugar para sindicatos, asociaciones u ONG; es hospital. Todo eso será para uso del hospital infantil. Al albergue se les ofreció un lugar con un precio razonable”, indicó.
La reubicación se planteó hace 2 años
La petición de los voluntarios del albergue Sonrisa por ambientes con mejores condiciones no es reciente, sino lleva varios años, según la voluntaria Cintya Lejsek.
En 2021, el asambleísta Rodrigo Valdivia, tras realizar una inspección, dijo que convocaría a una reunión a la dirección del Servicio Departamental de Gestión Social (Sedeges) por tratarse de un tema social, pero no hubo más avances. Otro de los sectores que exigen ambientes adecuados son los adultos mayores.