La granizada afecta la papa y la sandía; 30 municipios aún sufren por la sequía
La Empresa Misicuni comenzó ayer las pruebas para distribuir 50 litros de agua potable por segundo (l/seg) a Quillacollo, municipio en el que está la represa, a través de un tanque en Molle Molle.
Tras una inspección, el presidente de Misicuni, Óscar Zelada, informó que, en el municipio, emplazaron cinco tanques de almacenamiento con una inversión de 6 millones de bolivianos para beneficiar a 36 mil habitantes.
Sin embargo, pese a los avances, una de las principales dificultades para que los barrios se beneficien con el líquido vital es la falta de redes de distribución interna.
En ese contexto, Zelada exhortó a la Alcaldía a gestionar financiamiento para el tendido de tuberías y añadió que Misicuni cuenta con el prediseño para emplazar las redes.
Ante esta situación, el presidente de la Asociación de Agua Potable de El Paso, Kramer Berbetty, dijo que los vecinos están dispuestos a cubrir los costos de las redes internas, debido a que el Ejecutivo municipal no puede acceder a fondos por no cerrar el plan maestro.
“Como asociación, estamos dispuestos a aportar para el entubado, somos 1.500 socios y hay otros 500 interesados en espera”, afirmó.
Entre tanto, el concejal Roberto Castro indicó que el Viceministerio de Medio Ambiente otorgó, hace un mes, un plazo de seis meses para cerrar las obras del fallido plan maestro, previa presentación de una auditoría, mientras los procesos penales contra exautoridades y representantes de la empresa deben continuar.
