Avanza el centro de radioterapia en el hípico, pero pacientes aún peregrinan
El edificio del centro de radioterapia que se construye en el hípico avanza y se prevé que sea entregado en febrero de 2025. En tanto, los pacientes con cáncer peregrinan por atención en los hospitales públicos y las cajas.
De acuerdo al informe de la Agencia de Infraestructura y Equipamiento Médico (Aisem), el proyecto “llave en mano” tiene tres fases: el estudio técnico de diseño de preinversión, inversión (construcción) y puesta en marcha. La edificación y el equipamiento tiene una inversión de más de Bs 97 millones.
La orden de proceder para la primera fase se dio en septiembre de 2022 y fue concluida en agosto de 2023, posteriormente, se ingresó en la etapa de construcción. La obra tiene un gran avance y desde afuera se aprecia que se procede con la obra fina.
Componentes
La directora general ejecutiva de la Aisem, Verónica Casablanca, explicó a Los Tiempos que la unidad de radioterapia se encuentra en un terreno de 4.698,85 metros cuadrados (m2) y que la construcción se emplaza en una superficie de 3.098,29 m2.
Contará con un bunker teleterapia, un bunker braquiterapia, una sala de tomografía para simulación y equipamiento de alta tecnología. La constructora es la Asociación Accidental Eccsa-Consede Revollo y la fiscalización está a cargo de la Aisem.
Una vez concluida la obra, se habilitarán los servicios de acelerador lineal, braquiterapia alta tasa (iridio/cobalto), tomógrafo simulador, quimioterapia sensibilizante, medicina paliativa, nutrición oncológica, psicología oncológica, telesalud, oncología clínica y anestesiología. Se prevé que se beneficien más de 2 mil pacientes.
Tratamiento
Los pacientes con cáncer aún peregrinan por una atención médica en otros departamentos. Las únicas opciones están en Santa Cruz y La Paz.
La representante de los pacientes, Carmen Vargas, explicó que los enfermos suelen quedarse hasta tres meses en el lugar dependiendo del caso.
Los gastos no sólo son para los pasajes de ida y vuelta a los otros departamentos, sino también los enfermos deben prever la estadía, alimentación y hospedaje.
“Un paciente no puede ir solo, tiene que estar acompañado, porque se descompensa y necesita ayuda. Hay quienes se quedan en la casa de algún familiar y otros se alquilan un departamento por ese tiempo. Es muy complicado”, explicó.
Otros con más recursos económicos suelen viajar a países vecinos para tratarse de manera particular. Vargas dijo que el Estado debe velar por los pacientes; más aún, por los gastos grandes que realizan para salvar sus vidas.
Aseguró que los pacientes depositaron sus esperanzas en el proyecto, luego de varios años de protestas y peticiones por una radioterapia.
De acuerdo a los datos que compartió la Aisem, en 2023, en el país había más de 12 mil enfermos oncológicos, 2 mil están Cochabamba.
Los montos de gastos por paciente están entre los 5 a 7 mil bolivianos por mes. Sin embargo, hay casos que superan los 20 mil bolivianos. El técnico de la Aisem, Augusto Delgadillo, resaltó que el tratamiento tiene una efectividad de 80 a 90 por ciento.
El edificio del centro de radioterapia que se construye en el hípico avanza y se prevé que sea entregado en febrero de 2025. En tanto, los pacientes con cáncer peregrinan por atención en los hospitales públicos y las cajas.
De acuerdo al informe de la Agencia de Infraestructura y Equipamiento Médico (Aisem), el proyecto “llave en mano” tiene tres fases: el estudio técnico de diseño de preinversión, inversión (construcción) y puesta en marcha. La edificación y el equipamiento tiene una inversión de más de Bs 97 millones.
La orden de proceder para la primera fase se dio en septiembre de 2022 y fue concluida en agosto de 2023, posteriormente, se ingresó en la etapa de construcción. La obra tiene un gran avance y desde afuera se aprecia que se procede con la obra fina.
Componentes
La directora general ejecutiva de la Aisem, Verónica Casablanca, explicó a Los Tiempos que la unidad de radioterapia se encuentra en un terreno de 4.698,85 metros cuadrados (m2) y que la construcción se emplaza en una superficie de 3.098,29 m2.
Contará con un bunker teleterapia, un bunker braquiterapia, una sala de tomografía para simulación y equipamiento de alta tecnología. La constructora es la Asociación Accidental Eccsa-Consede Revollo y la fiscalización está a cargo de la Aisem.
Una vez concluida la obra, se habilitarán los servicios de acelerador lineal, braquiterapia alta tasa (iridio/cobalto), tomógrafo simulador, quimioterapia sensibilizante, medicina paliativa, nutrición oncológica, psicología oncológica, telesalud, oncología clínica y anestesiología. Se prevé que se beneficien más de 2 mil pacientes.
Tratamiento
Los pacientes con cáncer aún peregrinan por una atención médica en otros departamentos. Las únicas opciones están en Santa Cruz y La Paz.
La representante de los pacientes, Carmen Vargas, explicó que los enfermos suelen quedarse hasta tres meses en el lugar dependiendo del caso.
Los gastos no sólo son para los pasajes de ida y vuelta a los otros departamentos, sino también los enfermos deben prever la estadía, alimentación y hospedaje.
“Un paciente no puede ir solo, tiene que estar acompañado, porque se descompensa y necesita ayuda. Hay quienes se quedan en la casa de algún familiar y otros se alquilan un departamento por ese tiempo. Es muy complicado”, explicó.
Otros con más recursos económicos suelen viajar a países vecinos para tratarse de manera particular. Vargas dijo que el Estado debe velar por los pacientes; más aún, por los gastos grandes que realizan para salvar sus vidas.
Aseguró que los pacientes depositaron sus esperanzas en el proyecto, luego de varios años de protestas y peticiones por una radioterapia.
De acuerdo a los datos que compartió la Aisem, en 2023, en el país había más de 12 mil enfermos oncológicos, 2 mil están Cochabamba.
Los montos de gastos por paciente están entre los 5 a 7 mil bolivianos por mes. Sin embargo, hay casos que superan los 20 mil bolivianos. El técnico de la Aisem, Augusto Delgadillo, resaltó que el tratamiento tiene una efectividad de 80 a 90 por ciento.