La CAC pide declarar desastre y priorizar la seguridad alimentaria
La Cámara Agropecuaria de Cochabamba (CAC) planteó a la Asamblea Legislativa Departamental (ALD) considerar la aprobación de una Ley de Declaratoria de Desastre Natural si persiste la falta de lluvias hasta finales de este mes y sugirió a la Gobernación priorizar en esta coyuntura la seguridad alimentaria para evitar una escasez y una elevación del costo de productos de la canasta familiar.
El gerente general de la entidad, Rolando Morales, indica que una eventual declaratoria departamental de desastre le permitirá a la Gobernación gestionar de forma directa recursos de la cooperación internacional para atender la emergencia derivada del estrés hídrico.
“Si la sequía se prolonga hasta finales de octubre, la Asamblea Legislativa Departamental debería considerar esa ley (de declaratoria de desastre) y el Gobierno departamental tiene que priorizar la seguridad alimentaria, que va muy de la mano de la salud y la salud es vida, porque, al no haber la cantidad suficiente de productos para abastecer los mercados, la gente tendrá que consumir menos alimentos y eso provocaría que sus defensas bajen. Todo eso se llama seguridad alimentaria con soberanía, pero no tendría que quedarse en el discurso”, dice.
Desde la ALD ven viable aprobar una ley de declaratoria de desastre, pero siguiendo los procedimientos, es decir, que la iniciativa parta del Ejecutivo departamental para que en el Legislativo se proceda con el trámite correspondiente.
El asambleísta Renato Alanes dice que se están viendo todas las alternativas, entre ellas, la declaratoria de desastre natural, para coadyuvar desde la Asamblea en posibles soluciones para hacer frente a la sequía.
En la misma línea, su colega Diego Roca considera necesario y oportuno abordar el tema. Para ello, menciona, la Gobernación tendría que coordinar con la Asamblea a fin de que la Comisión Sexta trabaje en la redacción de un proyecto de ley lo más antes posible.
Disminución
Morales alerta que, en caso de no llover hasta mediados de octubre, la producción de alimentos, que actualmente llega a 1,5 millones de toneladas en Cochabamba, entre frutas, verduras, legumbres, tubérculos y otros, sufrirá una disminución del 15 por ciento, es decir, 225 mil toneladas menos.
A este riesgo se suma la probabilidad de que 15 mil hectáreas, de las 300 mil que se tiene en producción, no puedan ser sembradas durante la campaña de verano, que ya comenzó a finales de septiembre.
“Todavía tenemos la esperanza de que se precipite la lluvia, tal como ha pronosticado el Senamhi (Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología), por lo menos dos días, eso ayudaría para comenzar la siembra de verano”, manifiesta el gerente de la CAC en entrevista con Los Tiempos.
Morales demanda del Gobierno asignar mayores recursos para enfrentar la sequía y generar un marco normativo a fin de facilitar la provisión de agua mediante cisternas.