Desaceleración de economía en China puede afectar a Bolivia por dos bandos
La desaceleración de la economía china puede golpear a Bolivia por dos bandos: caída en los precios de las materias primanos de exportación y retrasos o incumplimientos de proyectos de inversión pública en sectores como infraestructura vial, minería o litio, de acuerdo con el consultor financiero Jaime Dunn.
Ayer, China dio a conocer que su Producto Interno Bruto (PIB) creció en 4,9 por ciento entre julio y septiembre interanual. Sin embargo, el dato también representa una disminución con relación al trimestre anterior, cuando se alcanzó 6,3 por ciento.
Aunque China superó los pronósticos para el tercer trimestre de este año (4,3 por ciento), el futuro inmediato aún es pesimista debido a la crisis del sector inmobiliario (que representa casi un cuarto de su PIB), la falta de transparencia en los datos divulgados, el extremo control estatal y la composición del crecimiento de su economía, el cual se basa, principalmente, en el consumo interno: 4,6 del 4,9 por ciento.
El economista Jaime Dunn señaló que los riesgos para Bolivia vienen por dos vías: por un lado, la caída de los precios de materias primas perjudicaría las exportaciones bolivianas, y, por otro lado, el riesgo de retraso o incumplimiento de inversiones para infraestructura en el sector energético postergaría proyectos por largos años esperados.
En el caso de Bolivia, China está detrás de proyectos como la metalúrgica del Mutún, la extracción directa de litio y el financiamiento de la planta refinadora de zinc en el departamento de Oruro.
Importaciones
China es el sexto país al que más exporta Bolivia, pero el primero en cuanto a importaciones, de acuerdo con datos de 2022.
Las compras de productos desde ese país fueron en aumento y el año pasado llegaron a 2.545 millones de dólares, mientras que las exportaciones sumaron 788 millones de dólares (ver infografía).
Al gigante asiático se exporta, principalmente, plata, zinc y carne de res.
Asimismo, es el principal acreedor bilateral, con el 72 por ciento de la deuda bilateral a 2022, según datos del Ministerio de Economía y Finanzas Públicas.
Dunn señaló que el Gobierno del presidente Luis Arce apuesta para que China saque a Bolivia de crisis económica que atraviesa; no obstante, el gigante asiático pasa por dificultades.
Existe falta de transparencia
En los últimos meses, China ha reducido la publicación de sus datos económicos, un aspecto similar a lo ocurrido con Bolivia desde principios de este año, cuando se comenzó a tener problemas con el flujo de dólares.
El analista financiero Jaime Dunn señaló que en este sentido no existe confianza de que el crecimiento del PIB chino sea el correcto.
Asimismo, tampoco hay transparencia sobre las inversiones chinas realizadas en Bolivia, como en el caso de los convenios en el sector del litio.