Se pierden 800 mil toneladas de soya por la sequía; el daño asciende a $us 300 millones
La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) reportó ayer una pérdida de al menos 800.000 toneladas de grano de soya en la campaña de siembra verano 2023-2024 debido a la prolongada sequía.
El presidente de la entidad, Fernando Romero, señaló que esta pérdida, una de las peores de los últimos 30 años, representan una afectación económica de 300 millones de dólares para toda la cadena de valor del sector productivo.
Indicó que a pesar de esta situación el abastecimiento de soya en el mercado interno está garantizado, porque solo requiere del 20% de la producción total.
Señaló que las pérdidas son resultado de la sequía histórica que se registró desde el inicio de la campaña de verano 2023-2024 hasta el desarrollo del cultivo en las principales zonas productivas de Santa Cruz.
El fenómeno, acotó, afectó la producción en Pailón, Cuatro Cañadas, San Julián y San José de Chiquitos, que concentran el 55% de la superficie total cultivada.
También se ven perjudicados los actores que componen la cadena productiva de la soya, como proveedores de insumos, exportadores y transportistas, acotó.
“A pesar de estas cuantiosas pérdidas productivas, queremos aclarar que el abastecimiento del mercado interno de soya está garantizado, pues solo requiere el 20% del total anual de nuestra producción de grano”, afirmó el presidente de Anapo.
Ante esta situación, Anapo pidió a las autoridades colaborar en la búsqueda de soluciones inmediatas y a mediano plazo.
Entre las medidas urgentes está la reprogramación de créditos de la banca para los productores afectados; la creación de un fondo de reactivación que permita reprogramar la deuda de capital operativo a 5 años; y la aprobación de nuevos eventos de biotecnología, como la soya HB4 tolerante a sequía, que se encuentra en proceso de evaluación de campo.
Asimismo, sugirió avanzar en la aprobación de la soya con tecnología Intacta con base en la homologación de los estudios realizados en países vecinos del Mercosur.
“Esto permitiría contar con genética de alto potencial de rendimiento para mejorar la productividad y mitigar las perdidas por sequía y ataque de plagas”, dijo.