YPFB dio su aval a la certificación de reservas de gas el 20 de junio de 2024
El 20 de junio, una comisión de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) emitió un informe de conformidad respecto al estudio de cuantificación y certificación de reservas de hidrocarburos en Bolivia, correspondiente al 31 de diciembre de 2023. Este estudio, que ha pasado por un riguroso proceso de corrección desde febrero, aún no ha sido divulgado públicamente.
El informe, que recomienda remitir los resultados a las instancias correspondientes, destaca: “De acuerdo al análisis realizado en el presente informe, la contraparte y comisión de recepción manifiesta la conformidad del servicio de la consultoría y recomienda remitir a las instancias correspondientes”.
La Ley 3740 obliga a YPFB a publicar la información de reservas hasta el 31 de marzo de cada año, una disposición que ha sido incumplida repetidamente en los últimos años. Pese a los intentos de Los Tiempos por obtener una declaración oficial de la empresa estatal, no se recibió respuesta. No obstante, el presidente de YPFB, Armin Dorgathen, aseguró el 18 de junio que la información sería divulgada en una próxima conferencia de prensa.
Según datos del Sistema de Contrataciones Estatales (Sicoes), YPFB contrató a la empresa Degolyer & MacNaughton Corp en diciembre del año pasado para realizar esta cuantificación, por un monto de 425 mil dólares.
El asambleísta departamental de Tarija, Luis Lema, quien ha seguido de cerca el incumplimiento de esta normativa, señaló que YPFB lleva seis años sin cumplir con la Ley 3740 y que ya cuenta con estudios, tanto de 2022 como del último año. “YPFB ya cuenta con ambos estudios, de manera que ya no existe excusa para que no se dé a conocer la certificación de reservas en el país”, manifestó Lema.
Según la Fundación Milenio, las reservas probadas de gas podrían haber disminuido a 2,13 TCF (trillones de pies cúbicos), una caída de más del 80 por ciento desde 2017, cuando las reservas alcanzaban los 10,7 TCF. La falta de nuevos descubrimientos y la escasa inversión en el sector podrían llevar a Bolivia a quedarse sin reservas para 2030 y pasar a ser un importador de gas. “Para el año 2030, prácticamente se habrían agotado las reservas efectivas de gas”, advierte un análisis de Milenio realizado en mayo de este año.
Esta situación crítica, señalan analistas, resalta la urgente necesidad de transparentar la información sobre las reservas.
Otros datos pendientes
El investigador de la Fundación Jubileo Raúl Velásquez indicó que, según la Ley 3740, YPFB debe publicar esta semana la información sobre costos recuperales y otros datos sobre las operaciones hidrocarburíferas.
La información a ser publicada incluye “volúmenes de producción, precios, ingresos brutos e inversiones”, escribió Velásquez en su cuenta de Twitter. “Ojalá esta vez cumplan la ley y no se inventen una invasión extraterrestre”, añadió.
Mientras tanto, la caída de la producción continúa. A mayo de este año llegó a 32,8 millones de m3d.