BCB monetizó 32,97 toneladas de oro, equivalente a $us 2.148 MM en 15 meses
Entre mayo de 2023 y agosto de 2024, el Banco Central de Bolivia (BCB) monetizó 32,97 toneladas de reservas de oro, equivalentes a 2.148 millones de dólares, según datos oficiales.
A medida que se monetizaban las reservas de oro, se adquiría nuevo material metálico de la producción local para reemplazar lo vendido y mantener las 22 toneladas que exige la Ley 1503.
Durante el período mencionado, el BCB adquirió 12,38 toneladas de oro por un valor aproximado superior a los 800 millones de dólares.
Los informes del BCB indican que la mayor cantidad de reservas en oro, 17 toneladas, se monetizó en los primeros cuatro meses tras la entrada en vigor de la ley. Posteriormente, el promedio mensual de monetización se estabilizó en 1,3 toneladas, es decir, oro convertido en dólares para su uso (ver infografía).
Simultáneamente, el ente emisor compró oro a un ritmo promedio de una tonelada por mes, ligeramente por debajo de la cantidad monetizada.
El presidente del BCB, Edwin Rojas, destacó la agilidad con la que se realizaba la refinación del oro para convertirlo en barras de buena entrega.
No sorprende
Analistas económicos señalaron que el ritmo de monetización de las reservas no es sorprendente, ya que ésta habría sido la intención inicial del BCB al impulsar la Ley 1503. No obstante, esta norma ha otorgado mayor liquidez a las Reservas Internacionales Netas (RIN), aunque el panorama para los próximos meses sigue siendo incierto.
“Esto ha permitido la recuperación de las reservas y el cumplimiento del servicio de la deuda”, opinó el economista Martín Moreira, quien recordó que otros bancos centrales han optado por adquirir oro como reserva de valor en los últimos meses.
Por su parte, el economista Alberto Bonadona calificó la situación de las RIN como “un verdadero desastre”, señalando que se ha pasado de tener alrededor de 15 mil millones de dólares en reservas durante los años de bonanza por los ingresos del gas a menos de 2 mil millones de dólares, de los cuales sólo 153 millones de dólares son divisas.
Estas divisas, es decir, dinero en efectivo, deben cubrir un ritmo de importaciones de 900 millones de dólares mensuales. El desequilibrio se refleja en la escasez de dólares, el tipo de cambio paralelo, la escasez de combustibles y el sostenido aumento de los precios de productos importados y de insumos necesarios para la producción nacional.
Ante este panorama, Bonadona señaló que las restricciones a las importaciones continuarán, y advirtió que el país podría acercarse a situaciones de crisis similares a las de Venezuela o Argentina.
El BCB expresó su confianza en que las reuniones entre el Gobierno y el sector empresarial, así como una eventual aprobación de los créditos estancados en el Legislativo (por mil millones de dólares), podrían mejorar la situación.
Sin embargo, Bonadona dijo que, aun si se aprueban estos créditos, la situación no mejoraría significativamente, ya que no se perciben señales claras del Gobierno.
Adversidades internas y externas
El BCB manifestó que enfrenta adversidades internas y externas, como aumento de tasas de interés, conflictos bélicos, eventos climáticos adversos, caída de venta de gas y no aprobación de créditos en la Asamblea Legislativa.