Carangas: el megaproyecto minero que revolucionará el futuro de Oruro
El sector minero boliviano se prepara para recibir un impulso decisivo con el desarrollo del proyecto Carangas, liderado por la empresa Granville SRL, subsidiaria de la canadiense New Pacific Metals Corp. JV. Tras años de prospección y exploración, este emprendimiento privado está destinado a convertirse en un motor económico clave para el departamento de Oruro y, por ende, para Bolivia. Con una inversión inicial proyectada de entre 300 y 400 millones de dólares, el impacto de este proyecto se sentirá no sólo en términos de generación de empleo, sino también en el fortalecimiento de las arcas estatales mediante regalías e impuestos.
En entrevista exclusiva con Los Tiempos, Marcelo Ballesteros López, viceministro de Política Minera, Regulación y Fiscalización, detalló el proceso que ha llevado a Granville SRL a este punto crucial. “La empresa ha invertido aproximadamente 15 millones de dólares en esta primera etapa de estudios, logrando identificar un cuerpo mineralizado de gran potencial, con minerales como plomo, plata, zinc, además de la presencia de oro y cobre”, indicó.
Un gigante minero
Ubicado en una franja mineralizada clave de Bolivia, el proyecto Carangas ha sorprendido por los resultados obtenidos durante las fases de exploración. Con más de 80 mi l perforaciones y 70 mil muestras analizadas en laboratorios internacionales, el rigor científico y técnico detrás de este proyecto es evidente. Según Ballesteros, “los estudios preliminares han mostrado que el yacimiento descubierto podría tener una magnitud comparable al de San Cristóbal, uno de los más importantes del país”.
Granville SRL ha concentrado sus esfuerzos en dos de las tres áreas mineras que posee bajo licencia: Granville 1 y Granville 2. Sin embargo, una tercera área, Granville 3, aún está en proceso de exploración, lo que podría arrojar datos aún más impresionantes sobre el volumen de los minerales presentes.
Trámites pendientes
El Viceministro también resaltó que uno de los obstáculos para el avance del proyecto ha sido el retraso en la obtención del derecho minero, un trámite que se había iniciado en 2023 ante la Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM). Aunque la Ley 535, en su artículo 156, establece que las empresas con licencias de prospección y exploración deben tener preferencia para migrar a un contrato administrativo minero, la falta de un reglamento específico había ralentizado el proceso.
No obstante, la reciente emisión de la Resolución Ministerial 229/2024 ha sido clave para destrabar este trámite. Este reglamento complementa la ley vigente, estableciendo los requisitos y procedimientos necesarios para que Granville SRL obtenga el derecho minero que le permitirá avanzar hacia la fase de producción. “El Gobierno ha puesto especial interés en agilizar este proyecto, dado su potencial y la necesidad de atraer inversiones extranjeras que beneficien al país”, explicó Ballesteros.
Impacto socioeconómico
El proyecto Carangas no sólo destaca por su riqueza mineral, sino también por el impacto social y económico que generará en la región. Según estimaciones oficiales, la inversión inicial prevista de hasta 400 millones de dólares no sólo cubrirá la construcción de la mina y planta, sino que también creará cientos de empleos directos e indirectos. Estos empleos beneficiarán principalmente a las comunidades locales, dinamizando la economía de Oruro y brindando nuevas oportunidades de desarrollo.
Además, las regalías mineras y los impuestos generados por la operación de Carangas proporcionarán un flujo constante de ingresos al Estado boliviano. Este aporte será crucial para financiar proyectos de infraestructura y servicios públicos en la región, lo que contribuirá a mejorar la calidad de vida de sus habitantes. “El desarrollo de este tipo de proyectos es vital para el futuro de Bolivia. Independientemente de si son gestionados por empresas privadas, como en este caso, los beneficios que traen al país son enormes y necesarios”, afirmó el viceministro.
Perspectivas futuras
Mientras Granville SRL se prepara para proporcionar datos más detallados sobre las reservas del yacimiento a finales de este año, las expectativas en torno a Carangas continúan creciendo. Las similitudes entre este proyecto y otros emprendimientos cercanos, como Negrillos PacuKollo, gestionados por la estatal Corporación Minera de Bolivia (Comibol), subrayan la riqueza mineral de la región. Aunque existen variaciones en la concentración de minerales, los indicios hasta ahora revelados indican que Carangas podría convertirse en un referente minero tanto a nivel nacional como internacional.
El Gobierno boliviano, consciente de la relevancia de este proyecto, ha asegurado un seguimiento minucioso para garantizar su desarrollo. “Este tipo de proyectos son lo que el país necesita para mantener su competitividad en el mercado internacional, y estamos comprometidos en facilitar su avance”, concluyó Ballesteros.
Con una proyección que promete beneficios a largo plazo para Bolivia, el proyecto Carangas se perfila como uno de los pilares en el futuro económico del país. En un contexto global donde la demanda de minerales continúa en aumento, Bolivia tiene en Carangas una oportunidad única para consolidarse como un jugador clave en el escenario minero mundial.