Por cierre, riego sólo llegó a 20 por ciento
Sólo el 20 por ciento de las 2.500 hectáreas del Cercado, Quillacollo, Tiquipaya y Colcapirhua recibieron agua para riego durante los cinco días que se desfogó la represa de La Angostura, hasta que los pobladores de Tolata y Arbieto cerraron por la fuerza las compuertas del embalse, informó ayer el vicepresidente de la Asociación de Usuarios del Sistema Nacional de Riego, Vladimir de la Barra.
El gerente de la Asociación de Regantes, Manuel Rocha, indicó que el estudio del Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología (Senamhi) determinó que la presa tenía 3,8 millones de metros cúbicos de agua y una altura de 1,39 metros.
El acuerdo consistía en sacar 67 centímetros de altura, alrededor de 1,5 millones de metros cúbicos y dejar el agua en un nivel de 70 centímetros de alto para la supervivencia de los peces, como determina el acuerdo firmado en 2013 entre regantes y pobladores de Tolata y Arbieto.
Rocha explicó que de los 67 centímetros que debían sacar sólo lograron desfogar siete centímetros, alrededor de 518.000 millones de metros cúbicos y todavía les queda por desfogar más de un millón de metros cúbicos.
“Las autoridades no hacen respetar los acuerdos. Nosotros estamos siendo gravemente afectados, hemos abierto las compuertas el miércoles y el agua tardó dos días en llegar”, dijo.
La siembra de maíz en La Maica Norte depende de La Angostura. En el sector hay 2.000 usuarios, informó un agricultor, Eduardo Quispe. “Con la llegada de las aguas de La Angostura tenía previsto sembrar 10.000 metros de maíz, pero si el agua no llega no podré hacerlo, porque la tierra no humedece”, dijo.
Otro agricultor, Gregorio Quispe (77) sembró una hectárea de maíz en agosto y sólo le faltaba un día para recibir el agua de La Angostura, pero debido al cierre no podrá regar. “Si no riego en unas tres semanas más voy a perder todos mis cultivos, ésta es la peor sequía que hemos tenido en 30 años”, lamentó.
Explicó que de los 600 usuarios de La Maica Norte sólo el 10 por ciento recibió agua para riego. “Muchos nos hemos quedado sin regar, la situación es terrible. Algunos bombean agua del río Rocha, pero es muy caro y además está contaminada”, declaró.
El lunes, la secretaria de la Madre Tierra, Soledad Delgadillo, calificó el cierre de arbitrario y anunció una convocatoria al diálogo a los alcaldes de Tolata y Arbieto con el gobernador Iván Canelas. Sin embargo, las negociaciones están demoradas por las actividades del mes aniversario de Cochabamba.
“Nosotros estamos a la espera de las gestiones que realice la Gobernación”, dijo de la Barra.
El representante enfatizó que se requiere el agua para riego urgente. “Cada día que pasa, el agua de la presa se evapora y la necesidad del líquido es urgente”, indicó. Pero, advirtió el riesgo de un enfrentamiento.
CAUDAL ES UNO DE LOS MÁS BAJOS
El nivel de agua de la represa de La Angostura es uno de los más bajos de los últimos años, dijo el gerente de la Asociación de Regantes, Manuel Rocha. El embalse acumuló 2,5 millones de metros cúbicos por la falta de lluvias. En 2015, 4 y en 1999, 5 millones.
Explicó que en 2000, 2011 y 2013 se almacenaron más de 2,5 millones de metros cúbicos y se dejaron 70 centímetros de agua para los peces.
En cambio, en 2000 y 1997 se dejó la laguna en el nivel cero; en 1998 el embalse tenía menos de dos metros, debido a que se sacó las aguas muertas para el riego de cultivos.
“La disputa por agua inicia después del 2000 cuando las actividades turísticas de la presa comenzaron a tener más fuerza”, dijo.