Con tests lentos y poco rastreo de contactos Florida es epicentro de la pandemia
Redacción Central |
Cuando Florida es epicentro del coronavirus en EEUU, dos herramientas clave para combatir la pandemia están atascadas: los resultados de las pruebas demoran más de 10 días en conocerse y el rastreo de contactos brilla por su ausencia, aspectos que la pone al igual que cualquier otro país de Latinoamérica.
La periodista española Gemma García se hizo el test a fines de junio en Miami y debió esperar 11 días para saber que había dado positivo.
Esto es mucho más que el período de 48 horas que recomiendan los Centros de Control de Enfermedades (CDC) para combatir la pandemia.
Este retraso entre las pruebas y sus resultados es una de las razones por las cuales Florida es epicentro de la pandemia, junto a Texas y California, en el país más afectado por este virus que azota el mundo.
"¿Qué hago yo con una paciente a la que le hago un test hoy y el resultado viene en tres, cuatro, cinco, seis días, cuando entre el test y el momento del resultado que sale positivo ya ha estado en contacto con un montón de gente?", dijo en conferencia de prensa el doctor Alberto Domínguez-Bali, del Hospital de Hialeah, en el oeste de Miami.
Varias ciudades en América Latina también sufren de la tardanza en la entrega de los resultados de las pruebas rápidas y el rastrillaje sobre posibles infectados no son los adecuados, lo cual aumenta los incrementos en los contagios y muertes.
Florida registró ayer 216 muertes por coronavirus y pulverizó el récord del día anterior, informaron funcionarios de Salud, en momentos en que la enfermedad avanza implacablemente en el estado del sureste de EEUU.
Luego de haberse cobrado la vida de 186 personas el martes, el virus suma un total de 6.333 fallecidos en el turístico "estado del sol", de acuerdo al Departamento de Salud.
Ayer, Florida sumó 9.446 nuevos casos, luego de varias semanas registrando cifras diarias en torno a los 10.000. En total, unas 451.423 personas se han contagiado.
Con 21 millones de habitantes, Florida superó recientemente a Nueva York y se mantiene como el segundo estado con más casos de Covid-19, apenas por debajo de California, que tiene el doble de su población.
La cuarta parte de los casos de Florida se concentran en Miami, el actual epicentro de la pandemia en el país y donde sólo 10,78 por ciento de las camas de cuidados intensivos están disponibles.
En EEUU han fallecido 150.000 personas desde el inicio de la pandemia, según la Universidad Johns Hopkins.
La popularidad del gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, ha caído en picada durante el último mes por su gestión de la crisis sanitaria, luego de haberse jactado en mayo de haberla contenido en un airado discurso en el que acusó a la prensa de propagar el pánico en la población.
Aliado fiel del presidente Donald Trump, DeSantis se ha negado a ordenar el uso de tapabocas, aunque algunos alcaldes lo han hecho obligatorio en sus jurisdicciones.