Bloqueos y protestas en el norte de Chile se recrudecen en plena transición
Decenas de camiones bloquearon hoy, por segundo viernes consecutivo, las carreteras y los acceso al aeropuerto de la ciudad septentrional chilena de Iquique en protesta por la muerte de un colega y la inseguridad que denuncian sufre toda la región, en la que es la última gran crisis del gobierno de Sebastián Piñera a semanas de entregar el poder.
Una crisis, vinculada a la política migratoria de la Administración saliente -que expertos locales califican de errática- que amenaza con convertirse en el primer gran desafío heredado para el presidente electo, Gabriel Boric, que asumirá el mando el próximo 11 de marzo.
En este contexto, la tensión escaló de nuevo este viernes en el norte de Chile después de que un incidente confuso desatara cortes de carretera, manifestaciones y una huelga de transportistas en las regiones septentrionales de Antofagasta y Tarapacá.
El detonante fue esta vez la muerte de un joven camionero de 22 años que, según la primera versión de los carabineros, murió al caer por un paso a nivel tras discutir que tres hombres -dos de ellos extranjeros- que supuestamente habían apedreado previamente sus vehículo.
Los tres sospechosos fueron arrestados en las horas posteriores y permanecerán detenidos hasta al menos el día 14 por petición de la fiscalía.
Desde la oficina presidencial informaron que Piñera, que ha sido duramente criticado junto a su gobierno por estar de vacaciones en plena transición, encabezó una "reunión de emergencia" para reforzar el trabajo policial en la zona norte.
"Empatizamos con el dolor de la familia y compañeros de Byron Castillo. Pero para poder seguir adelante con las conversaciones necesitamos el despeje de las rutas", advirtió el ministro del Interior, Rodrigo Delgado.
Crisis de fin de mandato
Junto con la escalada de violencia de La Araucanía (sur), una región en la que existe una disputa entre la comunidad indígena mapuche y grandes empresas forestales, la tensión en el norte del país es la gran piedra en el zapato del final del mandato del derechista Piñera.
En el último año, esta zona ha experimentado una crisis migratoria con olas masivas de ingresos clandestinos de migrantes y el colapso de pequeñas localidades fronterizas.
En paralelo, han ido en aumento desde el pasado septiembre las huelgas contra la entrada irregular de extranjeros y ataques xenófobos.
La crisis migratoria también distancia al actual presidente, partidario de "ordenar la casa" y de endurecer las fronteras, de Boric, ex líder estudiantil de izquierda.
Su mano derecha y futura ministra del Interior, Izkia Siches, expresó a través de Twitter su "preocupación": "Reafirmamos nuestro compromiso de trabajar con todos los actores desde el primer día de nuestro Gobierno en búsqueda de medidas efectivas".
Piden Estado de emergencia
La primera huelga se desarrolló en la región de Antofagasta, donde falleció el camionero, pero con el paso de las horas, se convocaron marchas en diversos puntos desde Iquique hasta una de las rutas de entrada a Santiago.
La Confederación Nacional de Dueños de Camiones de Chile (CNDC) y la Federación de la Zona Norte se declararon "en alerta" mientras que, en paralelo, se anunció la suspensión temporal de los vuelos comerciales en el aeropuerto Diego Aracena, en la región de Tarapacá.
El gobernador de la región de Antofagasta, el opositor Ricardo Díaz, también aseguró que los paros "van a afectar gravemente a la economía del país, porque van a impactar a faenas mineras", la principal industria de Chile.
"No podemos seguir perdiendo vidas por este desgobierno que no da garantías de un proceso regularizado de migración. Si es necesario un estado de emergencia, hágalo", espetó Díaz al Gobierno.
Pese a la pandemia y la crisis social de 2019, Chile sigue siendo uno de los países más atractivos para migrar dentro de América Latina por su estabilidad política y económica.
Los inclementes pasos altiplánicos del norte siguen formando la principal ruta de ingreso irregular, un paso en el que han perdido la vida al menos dos personas en lo que va de año y una veintena desde que se inició el flujo masivo en febrero de 2021.
En Chile hay 1,4 millones de migrantes, lo que equivale a más del 7 % de la población, y los venezolanos son los más numerosos, seguidos de peruanos, haitianos y colombianos.