Rabia en Rusia por la muerte de 89 movilizados en Ucrania
Con flores y oraciones, los rusos protagonizaron ayer varias concentraciones para rendir homenaje a decenas de militares muertos en un ataque en el este de Ucrania, un hecho que conmocionó a Rusia y desencadenó una ola de críticas a su Ejército.
Unas 200 personas participaron en un homenaje en la ciudad de Samara (centro), de donde eran oriundos algunos de los soldados fallecidos.
Varias personas depositaron rosas o coronas de flores ante una llama en una de las principales plazas de la ciudad, inclinándose respetuosamente o haciendo la señal de la cruz, constató la AFP.
Un sacerdote ortodoxo recitó una oración y, a continuación, los soldados dispararon sus rifles al aire.
Según los medios locales, se celebraron concentraciones en otras ciudades de la región, como Togliatti y Syzran.
En un hecho inusual en Rusia —cuyas autoridades mantienen un hermético silencio sobre las bajas militares en Ucrania—, el Ministerio de Defensa dijo el lunes que 63 soldados murieron por un ataque ucraniano en la noche de Año Nuevo en un bombardeo ucraniano en Makéyevka, en la región anexionada de Donetsk, en el este de Ucrania.
Hoy, el Ministerio de Defensa ruso elevó la cifra a 89.
El gobierno de Kiev afirma que el número de víctimas es mucho mayor.
Las pérdidas es de las más cuantiosas sufridas por Moscú en un solo ataque desde el lanzamiento de la ofensiva contra Ucrania en febrero de 2022.