Lima vivió otro día de protestas con enfrentamientos y destrozos
Las manifestaciones antigubernamentales que se realizan ayer en Lima derivaron en nuevos enfrentamientos con las fuerzas de seguridad y “severos daños” en la infraestructura en el centro histórico de la capital de Perú, informaron fuentes oficiales.
Las protestas reunieron por segundo día consecutivo a miles de personas, muchas de ellas llegadas desde las regiones del sur de Perú y, tras un inicio pacífico, llevaron a choques con los agentes de la policía, que en varias calles lanzaron gases lacrimógenos.
Las cámaras de seguridad de la Municipalidad de Lima mostraron que piquetes de manifestantes intentaban ingresar por calles paralelas hacia la céntrica avenida Abancay, donde se encuentran las sedes del Congreso y la Fiscalía peruana.
Vandalismo
Las imágenes, difundidas ampliamente por medios locales, mostraron que otro grupo dañó la infraestructura de la estación Colmena del servicio de transporte público del Metropolitano.
Grupos de agentes bloquearon con urgencia las calles cercanas al Mercado Central y el Barrio Chino de Lima, por donde se informó que piquetes de personas iban a intentar romper el cerco policial.
Hasta la zona llegaron tanquetas y vehículos blindados de la Policía Nacional, así como vehículos y camiones portatropa de la Marina de Guerra, aunque sin que estos intervengan directamente en los enfrentamientos.
Reporte policial
Al respecto, el general Víctor Zanabria, jefe de la Región Policial de Lima, declaró al Canal N que en Lima “hay unas 2.500 personas haciendo actos violentos que la Policía controla haciendo uso de medios químicos”.
“Esperemos que vuelva la calma, pero ya tenemos cuatro detenidos por disturbios y daños a la propiedad, las operaciones están en desarrollo”, remarcó.
Zanabria dijo que en el centro histórico “ha habido graves daños a la propiedad pública y privada, en los parques se han destruido rejas y bancas”, y que las detenciones se producen por delitos como alteración del orden público, disturbios y resistencia a la autoridad.
Desde que el jueves comenzaron las masivas manifestaciones en Lima se ha detenido a 38 personas, y que también se reporta 29 policías y 24 civiles heridos.
Al referirse a las movilizaciones del jueves, la defensora del pueblo, Eliana Revollar, destacó ayer que la masiva protesta en Lima no tuviera “un costo social” de muertos en la capital, a pesar de que sí se produjeron dos decesos en otros puntos del país.
Puno incendiario
Un grupo de manifestantes antigubernamentales atacaron y quemaron ayer la comisaría del municipio peruano de Zepita, en el departamento de Puno (fronterizo con Bolivia), según confirmaron a Efe fuentes de la Policía Nacional.
Las comisarías puneñas de Desaguadero e Ilave también fueron atacadas por parte de los manifestantes con piedras que provocaron desperfectos en las instalaciones de la Policía, pero no dejaron agentes heridos.
Las tres localidades se encuentran en línea y conectadas con el Centro Binacional de Atención en Frontera de Desaguadero, un puesto aduanero quemado la tarde de ayer por los manifestantes, según informó el Ministerio de Relaciones Exteriores en sus redes.
Las acciones de protesta se produjeron en un 38 por ciento de las provincias del Perú.
Las protestas han dejado desde diciembre pasado 44 manifestantes y un policía muertos, mientras que otras 14 personas, entre ellas un bebé nonato y cuatro haitianos, fallecieron por causas provocadas por los bloqueos.
Manifestantes atacan por tercera vez mina en Cusco
Decenas de manifestantes ingresaron ayer a las instalaciones de la empresa minera Antapaccay, en la región del Cuzco, en el sur de Perú, donde se produjo un incendio, al parecer causado por la quema de pastizales, y daños en la infraestructura, informaron medios locales.
Se trata del tercer ataque que sufre en los últimos días la mina que opera la multinacional Glencore en la provincia cuzqueña de Espinar, desde que en diciembre pasado comenzaron las manifestaciones antigubernamentales en Perú.
Según la información, en un primer momento se planteó un diálogo con representantes de la mina, pero luego los manifestantes ingresaron a las instalaciones, donde se produjo la quema de pastizales cerca de las viviendas de los trabajadores.
La agencia oficial Andina detalló que “alrededor de 300 desconocidos, varones en su mayoría, ingresaron al campamento” minero y quemaron pastizales, incendiaron algunos inmuebles y “cometieron destrozos, saqueos de bienes de la empresa y del personal”.
“Los sujetos aprovecharon el momento por la escasa seguridad y la ausencia de la Policía Nacional. Por fortuna no hay daños personales, pero se teme que haya más incendios”, agregó.
El diario La República señaló que la empresa había lanzado poco antes una alerta sobre la amenaza de los manifestantes. La emisora RPP indicó que los policías que llegaron fueron atacados con piedras por los manifestantes.