Presidenta de Perú confirma nueva muerte y ya suman 70 los fallecidos por protestas
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, confirmó hoy viernes la muerte de un ciudadano durante las protestas registradas el jueves en la región sureña de Apurímac, con lo que son ya 70 los fallecidos en el marco de estas jornadas.
"Yo lamento mucho el fallecimiento, y mis condolencias desde acá a la familia", expresó la mandataria durante una rueda de prensa en Palacio de Gobierno, en el centro de Lima, donde ofreció un balance de sus dos meses de gobierno.
Según reseñaron medios locales, Denilson Huaraca Vílchez, de 22 años y natural de la comunidad de Huancabamba, habría fallecido en los enfrentamientos del jueves entre los manifestantes y la policía nacional en el sector Siete Vueltas, de la provincia apurimeña de Aymaraes.
La emisora privada "Radio Programas del Perú" indicó al respecto que funcionarios de la morgue de la provincia de Abancay informaron que el joven "llegó cadáver" al establecimiento.
Por el momento, las autoridades efectúan las diligencias correspondientes para determinar las "causas certeras" de este nuevo deceso en el marco de las manifestaciones antigubernamentales.
Según reportó hoy en un comunicado el Hospital Regional Guillermo Díaz de la Vega de Abancay, la noche del jueves fueron ingresados tres pacientes graves con "herida por proyectil de arma de fuego", y vienen siendo atendidos permanentemente por el personal de salud.
Durante las jornadas violentas del jueves en Apurímac, los manifestantes incendiaron un bus interprovincial en el desvío Pampachiri-Quillcaccasa, por lo que los pasajeros se vieron obligados a bajar y seguir su camino por sus propios medios, mencionó la agencia estatal Andina.
Además, quemaron una caseta de control de La Balanza, en Aymaraes, y atacaron a los vehículos de carga pesada que se encontraban varados por el bloqueo de la vía Interoceánica.
Perú vive desde diciembre pasado, tras la destitución del ex mandatario Pedro Castillo y la posterior asunción presidencial de Boluarte, una ola de manifestaciones que dejan ya 70 fallecidos, entre ellos 48 manifestantes y un policía que murió quemado.