Cuba recibe ya las intensas lluvias asociadas a la tormenta tropical Idalia
Las lluvias asociadas a la tormenta tropical Idalia en su desplazamiento por el mar Caribe azotan ya gran parte del territorio de Cuba, en particular en sus regiones occidental y central, refiere el aviso de ciclón tropical del Instituto de Meteorología (Insmet) emitido este domingo por la tarde.
La tormenta, la décima de la actual temporada de ciclones en el Atlántico, ha mantenido un movimiento "lento y errático" sobre el noroeste del mar Caribe y en las últimas horas se movió al nordeste a solo 6 kilómetros por hora, señaló el Centro de Pronósticos del Insmet.
En este momento, Idalia se encuentra situada a 155 kilómetros al estesudeste de Cozumel, México, y a 200 kilómetros al sur del cabo de San Antonio, el extremo de Pinar del Río, la provincia más occidental de Cuba, que ya fue afectada gravemente por el huracán Ian, de fuerza 3, el año pasado.
El Insmet advirtió que mantiene una "estrecha vigilancia" sobre la evolución de este organismo ciclónico, debido a la posición actual y futura trayectoria de esta tormenta tropical.
Idalia se acompaña de vientos máximos de 65 kilómetros por hora con rachas superiores y de un área de chubascos, lluvias y tormentas eléctricas que se han intensificado en horas de esta tarde.
Las precipitaciones están afectando zonas de las provincias de Pinar del Río, Artemisa, Mayabeque y Matanzas -en el oeste- y las de Cienfuegos y Camagüey, en el centro, y también al municipìo especial Isla de la Juventud, situado a unos 163 kilómetros al sur de La Habana.
Los meteorólogos cubanos han llamado a prestar "especial atención" a las lluvias, por la "persistencia e intensidad" que puedan presentar, sobre todo en Pinar del Río, Artemisa y la Isla de la Juventud, y también a los mares al sur de esos territorios donde se prevén fuertes marejadas con acumulaciones de agua en zonas bajas del litoral.
Las autoridades del país han ordenado adoptar las medidas preventivas, sobre todo con las personas en situación de vulnerabilidad, y a cumplir con las orientaciones de la Defensa Civil y los planes previstos para reducir riesgos y desastres ante el impacto de los eventos meteorológicos.
A principios de junio pasado un temporal de intensas lluvias azotó el centro y el oriente de Cuba, donde provocó la muerte de una persona, la evacuación de miles por inundaciones, daños a viviendas y al servicio de electricidad.
Las inundaciones en algunas localidades dejaron incomunicadas a comunidades, los suelos se quedaron saturados, hubo ríos desbordados y embalses que llegaron al límite de su capacidad de almacenamiento.
En la actual temporada de ciclones en el Atlántico -que se extenderá hasta noviembre próximo- los pronósticos de los especialistas cubanos ven "moderadas" las probabilidades de que se origine e intensifique al menos un huracán en el mar Caribe.
En septiembre de 2022, Cuba fue golpeada fuertemente por el huracán Ian, que dejó en la región occidental de su territorio severas afectaciones, especialmente en Pinar del Río, donde causó graves estragos cuyas secuelas todavía están presentes.
Ese meteoro causó la muerte de cinco personas y dejó cuantiosos daños en más de 100.000 viviendas, la agricultura, y en los servicios de electricidad, telefónicos y el suministro de agua potable.