Fuerzas Armadas alemanas desconectan instancia de Webex tras un fallo de seguridad
Las Fuerzas Armadas alemanas desconectaron de internet una instancia de Webex tras un fallo de seguridad por el cual datos de más de 6.000 reuniones por videoconferencia de las fuerzas armadas alemanas estuvieron visibles en la red hasta el viernes por la noche, según revela este sábado "Zeit Online".
La edición digital del semanario señala que los expertos llevaban días sin lograr borrar las citas de videoconferencias que habían tenido lugar en el pasado, algunas de ellas catalogadas como clasificadas por tratar cuestiones como los misiles Taurus y Meteor o discusiones en torno al tema "campo de batalla digital".
Así, entre los datos visibles relativos a estas videoconferencias figuraban la fecha, la hora y la duración, la persona convocante y el tema de la reunión.
Además, los enlaces a las salas de reuniones personales de los 248.000 miembros de las Fuerzas Armadas alemanas estaban organizadas según un esquema identificable y tampoco estaban protegidas por contraseña.
Así, por ejemplo, "Zeit Online" pudo encontrar, entre otras, la sala de reuniones digital de Ingo Gerhartz, jefe de la Fuerza Aérea.
Gerhatz fue uno de los participantes en la conversación virtual entre cuatro oficiales alemanes sobre los Taurus filtrada por medios rusos, que según informó entonces el ministro alemán de Defensa, Boris Pistorius, había podido ser grabada por un "error individual" de un participante al conectarse desde otro país sin la precaución necesaria.
Las Fuerzas Armadas alemanas celebran, según sus datos, 45.000 reuniones al mes.
La Oficina Federal de Seguridad de la Información (BSI) aprobó Webex en general para su uso por las autoridades en 2019 y lo certificó de acuerdo con su catálogo de criterios para la computación en la nube.
"Zeit Online" advierte de que también las instancias del canciller, Olaf Scholz, y de los Ministerios de Finanzas, Investigación y Economía estaban o siguen afectados.
Así, el semanario pudo conectarse este sábado a las salas de reuniones digitales de Scholz y el ministro de Economía, Robert Habeck, mientras que la del titular de Finanzas, Christian Lindner, ha sido en tanto cerrada.