Ley antidroga prevé estudio sobre cocaína
El viceministro de Defensa Social y Sustancias Controladas, Felipe Cáceres, informó ayer que con seguridad el estudio de conversión coca-cocaína, sugerido por la Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (Unodc), será encargado los primeros meses del 2017.
El martes, el representante de la Unodc, Antonino de Leo, dio a conocer el informe del monitoreo de cultivos de hojas de coca de Bolivia el que reflejó que se redujeron de forma neta un 1 por ciento en 2015 y se situaron en 20.200 hectáreas. También señaló que el 35 por ciento de la producción de coca en Bolivia, es decir, 11.300 toneladas, no llega a los mercados autorizados de Villa Fátima (La Paz) y Sacaba (Cochabamba).
Al concluir el informe, De Leo recomendó a Bolivia la elaboración de un “estudio sobre la conversión coca-cocaína que permita estimar el potencial de producción de cocaína en el país”. Agregó que aunque Bolivia manifestó que la normativa legal no le permite realizar este estudio, “la Unodc considera necesario encontrar los mecanismos que permitan su realización”.
Por lo mismo, Cáceres señaló que en el proyecto de Ley de Sustancias Controladas incluirá la realización del estudio de conversión coca-cocaína. “Como vamos a modificar la Ley 1008, se va a incluir un artículo transitorio para que autorice y se pueda hacer este estudio”, dijo.
Agregó que ya se tienen conversaciones con la Unión Europea para que esta organización financie este estudio en Bolivia. “Ese tema está garantizado. Yo creo que con seguridad el siguiente año, los primeros meses” se iniciará el estudio.
Desvío
Frente al desvío del 35 por ciento de la coca, Cáceres señaló que esto se debe a la existencia de mercados ilegales que son provocados por la existencia de la demanda. “El desvío es al lado de Yapacaní, esa coca no sale al lado de Cochabamba, sale al lado de Santa Cruz. Hay un mercado ilegal al otro lado”, dijo.
Explicó que a pesar de los “fuertes” controles de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (Felcn) los intermediarios conocidos como los “chakas” se dan modos para trasladar la coca y desviarla para el narcotráfico.
Sin embargo, destacó que en relación al 2014, la cantidad de coca desviada disminuyó en 5 por ciento.