Pepinos y Chorizos en las calles
Fiel a mi vocación periodística decidí pasar mis ojos observadores por los sucesos triviales del Carnaval, y otros tan parecidos como las sesiones de gabinete, a la cual también son convocados siempre Pepinos y Chorizos
El titular de esta columna obedece a que el autor cumple sin aspavientos la misión de captar las alegrías y tristezas de su entorno que hoy tiene algo de carnavalesco y mucho de preocupación por los sucesos que se desarrollan en varias ciudades del país, donde se producen marchas, huelgas de hambre y paros cívicos con la colaboración de agentes policiales que acatan órdenes del Ministerio de Gobierno y aportan con buenas dosis de gases lacrimógenos y otras armas contundentes, sin vacilar en ingresar violentamente a templos católicos en busca de revoltosos.
Impregnado del espíritu de las carnestolendas (que no son lo mismo que tos lendas carnes) asistía al despertar del Pepino, los Chorizos etc., etc., en un forzado acto realizado en el Cementerio General, en el cual me encontré con importantes hombres del Gobierno, activos elementos de la oposición y pueblo en general; quiero aclarar que entre las personalidades que asistieron al evento no se hallaban hombres serios como el ministro de Gobierno Carlos Romero o Asambleístas como el Gringo Gonzales y Gabriela Montaño, que son poco carnavalescos.
Enterada de mis andanzas periodísticas, mi corresponsal en el Palacio Real de la Plaza Murillo me dijo que anduviera con cuidado en estos días precarnavaleros pues los pobladores de La Paz, al igual que de otras ciudades del país, se encontraban exigiendo la abrogación del Código Penal, o la reaparición del Pepino, que siempre va acompañada de “Chorizos” o funcionario públicos de manos ligeras.
Fiel a mi vocación periodística decidí pasar mis ojos observadores por los sucesos triviales del Carnaval, y otros tan parecidos como las sesiones de gabinete, a la cual también son convocados siempre Pepinos y Chorizos pues de todo hay en la viña del Señor.
De esa manera me enteré que el Presidente Vitalicio ha convocado a sus íntimos del Conalcam y sus parejas las Bartolinas para estudiar con ellos los posibles cambios en su Gabinete, pues existen Ministros y Ministras en la mira, especialmente por los acontecimientos en el sector salud.
Resistente mi cuerpo para escribir al mismo tiempo sobre Pepinos, Chorizos, Ministros y altos funcionarios de gobierno, puesto que todos son parecidos, me puse a la tarea de dar comienzo al Carnaval itinerante que empezó en La Paz, seguirá en Oruro y luego pasará a Cochabamba y Santa Cruz, siempre que mi cuerpo aguante, y mi comadre Macacha me facilite unos pesos en calidad de préstamo que le será devuelto porque no soy ningún “chorizo”.
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