“Fake news” leído en un sueño húmedo
En mi pesadilla de anoche me vi caminando por Moscú bajo la nieve. De pronto, una bellísima moscovita enfundada en un abrigo de visón se me vino encima. Con deliciosas caricias, me hurgó los bolsillos mientras me susurraba: “escribe este fake news”. Cuando quise asirla, la belleza despareció en la borrasca.
Revise rápidamente mis bolsillos. No me había robado nada. Más bien había introducido un legajo de papeles. Los leí a la luz de un farol y desperté.
Ahora escribo de memoria el documento que leí en mi pesadilla. Así cumplo el mandato de la moscovita de mis sueños.
Cartilla confidencial de un agente de ventas de campañas electorales a sus aprendices en Bolivia
Primero pongamos en claro la perspectiva desde la que trabaja nuestra empresa: Una cosa es la política y otra cosa es la campaña electoral. Nosotros somos expertos en campaña electoral.
La política tiene como meta construir un país que promueva igualdad y equidad. Eso es muy trabajoso y no da ingresos inmediatos. Esos temas no nos interesan sino como discurso. Una campaña electoral tiene como meta promover desigualdades e inequidades para acaparar votos concretos. Eso es muy rentable.
Una campaña política necesita exponer la división, las diferencias sociales, el racismo y los colores de piel porque los electores quieren campeones combativos. Eso es sumamente rentable porque uno que quiere ser campeón necesita una billetera veloz.
Nuestro negocio es de rentabilidad sostenible, porque cuando logramos la victoria de un candidato, generamos una oposición que comprará nuestros servicios.
Sabemos también que el candidato vencedor intentará formar gobierno sobre un piso que su propia campaña electoral ha vuelto estrecho. No tendrá más remedio que llamarnos para volver a hacer campaña.
Los electores bolivianos tienen la peculiaridad de querer que las campañas electorales sucedan en un ring de lucha libre para elegir a un director de orquesta sinfónica.
En los últimos 14 años tuvimos una situación excelente porque el director de orquesta no cesó de hacer campaña. Lamentablemente, para él y nosotros, sus discursos de campaña se desgastaron. Contra él y nosotros se levantó una campaña espontánea, con un excelente canto pegajoso. Sus costos fueron tan bajos que no pudimos competir. Felizmente, logramos que dos advenedizos se encaramaran a la campana espontánea y volvimos a encarecer el negocio. Ambos advenedizos cambiaron el canto pegajoso por himnos patrióticos y religiosos y comenzaron a perder la base sobre la que se habían encaramado.
Luego vino la pandemia, que encerró a muchos. Nadie quería salir a hacer campaña. Sin embargo, logramos algunos negacionistas de la Covid que salieron a contagiarse para hacer campaña. Gracias a estos héroes pudimos reafirmar nuestro principio “Ni un día sin campaña” o “Campaña 24/7”.
Hoy estamos a la expectativa de algunos candidatos prometedores para el futuro cercano:
Tuvimos la suerte de que Áñez, que pudo haberse limitado a dirigir la orquesta, quiso hacer campaña, lo que está siendo muy rentable para nosotros. Como suele suceder, cuando un director de orquesta baja al ring de lucha libre para hacer campaña, desafina la orquesta y dificulta la campaña. Nos olvidaremos de ella.
Mesa no quiere hacer una campaña tradicional que exponga la división, las diferencias sociales, el racismo y los colores de piel. Prefiere mostrar anticipadamente que puede dirigir una orquesta. Esa campaña no es rentable para nosotros que nos especializamos en impulsar campeones furiosos en el catch as can. Sin embargo, tiene muchas probabilidades de dirigir la orquesta. Si lo logra, necesitará mucha campaña para conservarse.
Camacho y el Mallku están haciendo una campaña que nos gusta porque es cara y muy rentable. Sin embargo, sabemos que no llegarán a dirigir la orquesta. Quizás con ellos tengamos breves campañas rentables.
Evo no puede ser director de orquesta y no quiere que nadie lo sea. Por eso hace campaña contra Arce y contra sí mismo porque se enorgullece y se siente campeón cuando todos hacen campaña contra él. Así se ahorra el gasto de una campaña en su favor, que sería muy cara pues sus discursos ya no son creíbles. Sin embargo, tiene amenazas de orden legal y necesitará hacer campaña en el futuro. Con Evo tendremos mucha campaña porque no le faltará financiamiento ni orgullo herido. Permanecemos muy expectantes.
Arce hace campaña para atraer a los que Evo ha ahuyentado, pero pierde a los que Evo tiene y no será campeón de nadie. Es avaro. Nos olvidaremos de él.
Nos olvidaremos nuevamente de Doria Medina.
Tuto hace campañas baratas en casa, pero su verdadero objetivo es dirigir orquestas en el extranjero. Nuestra sucursal en la OEA y la ONU permanece expectante.
El autor es ciudadano y artista
Columnas de LUIS BREDOW SIERRA