Hora definitiva
Las elecciones en Venezuela ya tienen fecha: el 28 de julio. El chavismo, fuerza enfrascada en el culto a la personalidad, postulará a Nicolás Maduro, que gobierna el país desde 2013.
En caso de ganar y ser reelecto, sumará cuando menos 17 años sin salir del Palacio de Miraflores.
La reelección en Venezuela es infinita, o mejor, dicho, indefinida. Desde 1999, Venezuela no conoce un gobierno que no sea rojo rojito.
La oposición cuenta con María Cristina Machado, ganadora de las primarias de octubre del año pasado. Sin embargo, desde 2021 Machado está legalmente inhabilitada para competir. No puede hacer vida pública por 15 años, según una sentencia que fue ratificada por la Corte Suprema. La mayor parte de los líderes opositores han sido convertidos en “cadáveres civiles” por iniciativa de la justicia. Lo más grave de la re-inhabilitación de Machado es que se produjo después del pacto de Barbados, por el que gobierno y oposición se comprometieron a tener elecciones justas y limpias.
Nos pusimos a leer la sentencia contra Machado. ¿De qué se la acusa exactamente? Transcribimos: “(de ser) participe de la trama de corrupción orquestada por el usurpador Juan G. Antonio Guaidó, que propició el bloqueo criminal a la República Bolivariana de Venezuela, así como también el despojo descarado de las empresas del pueblo venezolano en el extranjero”.
No pues. Así no hay forma. Si el requisito para ser candidato en Venezuela es no haber apoyado a Guaidó en los años previos, los únicos habilitados son Maduro, los dos Rodríguez (Jorge y Delcy) o Diosdado.
En los hechos la democracia venezolana no tiene plan B, es con Machado o no hay nada.
Columnas de LA H PARLANTE