Cepa brasileña causa ajetreo y colapsos en hospitales de Bolivia
Incertidumbre, aislamiento de ciudadanos haitianos, colapso en el hospital de Cobija, Pando, un nuevo incremento de casos de coronavirus en poblaciones de Beni fronterizas con Brasil, anuncios de endurecimiento de controles en frontera y recomendaciones de no retornar a clases presenciales son los elementos que rodean la inminente presencia de la cepa brasileña P-1 en el país y el inicio de una tercera ola de la Covid-19.
“Pensamos que ya está en nuestro territorio (la cepa brasileña), tenemos un rebrote en el norte de Bolivia, donde hay un flujo de personas muy alto”, señaló ayer la jefa de Epidemiología del Ministerio de Salud, María Bolivia Rothe, en referencia a los reportes de Guayaramerín y Riberalta (Beni), Cobija (Pando) y Puerto Quijarro (Santa Cruz).
En esta última región, el Servicio Departamental de Salud (Sedes) cruceño indaga sobre la presencia de la variante brasileña a raíz de la muerte por Covid-19 de dos personas que asistieron a una boda en la localidad brasileña de Corumbá.
“Hay varias variantes, a nosotros nos preocupa la brasileña; pensamos que ya está en territorio boliviano. Hemos tenido la semana pasada un brote de coronavirus en el norte del Bolivia, (…) hay mucha gente que trabaja en Brasil y vive en Cobija o viceversa; hay niños que estudian en Epitazolandia (Brasil) y viven en Cobija, entonces hemos tenido un aumento de casos, un brote, y sí, pensamos que es la cepa brasileña”, declaró Rother a Unitel.
Aislados
El director del Sedes de La Paz, Ramiro Narváez, informó que una familia de ciudadanos haitianos que llegó procedente de Brasil fue aislada por sospechosa de que sea portadora de la variante brasileña de coronavirus.
“Se les ha realizado las pruebas PCR y obviamente fueron internadas y aisladas en el Hospital del Norte. Actualmente toda la familia está en el Hotel Medicalizado del Deporte, se encuentran estables y están en proceso los estudios genéticos”, detalló.
Juan de Dios Rodríguez, director del Comité de Operaciones de Emergencia (COE), informó que, debido al aumento de contagios en Pando y la nueva cepa, el hospital Missuti de Cobija se halla colapsado. Además, hay escasez de oxígeno.
“En Cobija, en el hospital de referencia de Covid que tenemos, ya estamos prácticamente saturados, ya no hay espacio. Estamos preocupados”, aseveró.
Por otra parte, el Ministerio de Salud no recomienda un retorno a las aulas ante el pedido de padres de familia de varios municipios para que los estudiantes vuelvan a las aulas.
Médicos ratifican precariedad del sistema; Auza espera reporte de la OMS
Ante la amenaza de la tercera ola de la pandemia de Covid-19 en Bolivia, los médicos de La Paz y El Alto afirman que no hay condiciones para afrontar la enfermedad por la falta de medicamentos, oxígeno, camas de terapia intensiva, recursos humanos e infraestructura.
El secretario ejecutivo del Sindicato de Ramas Médicas de Salud Pública (Sirmes) de La Paz, Fernando Romero, dijo que el Gobierno no equipó los hospitales ni los centros de salud para atender la tercera ola de la pandemia.
“El Gobierno no ha preparado las condiciones para la tercera ola. En los hospitales no hay las condiciones, no tenemos recursos, no hay oxígeno, no hay medicamentos ni camas suficientes para terapia intensiva. Es preocupante, porque esta nueva es cepa es más fuerte que las anteriores y estamos desprotegidos”, dijo.
Contención
El ministro de Salud, Jeyson Auza, aseguró que, de ser necesario, se reforzarán las medidas de bioseguridad y restricción en los puestos fronterizos, e indicó que todo dependerá de un reporte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) o la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
“Sobre la base de informes epidemiológicos serios y reportes de instancias internacionales, como ser la OMS y la OPS, de ser necesario se van a endurecer las medidas de seguridad y restricción en frontera. Vamos a asumir medidas”, señaló el Ministro de Salud.