Analistas ven como un ejercicio democrático las disputas en el MAS
La división del Movimiento Al Socialismo (MAS) al interior de la Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) pone en riesgo la gobernabilidad en el país en caso de agudizarse, pero por el momento es una suerte de ejercicio democrático después de 16 años sin controversia, coincidieron por separado los analistas políticos María Teresa Zegada y Carlos Borth.
El MAS afronta una división interna entre dos corrientes: la “evista”, liderada por Evo Morales, y la “renovadora”, liderada por Luis Arce y David Choquehuanca.
La pugna se acentuó después de que la bancada de Arce aprobó la Ley de Aplicación de los Resultados del Censo con el respaldo de las fuerzas opositoras Comunidad Ciudadana (CC) y Creemos para poner fin al conflicto desatado en Santa Cruz durante 36 días.
Para la politóloga María Teresa Zegada, las tensiones al interior del MAS, que aparentemente eran solamente unos desacuerdos internos, muestran una fisura que no es pasajera. “Hay una suerte de electoralización, de alguna manera Evo Morales ya se está perfilando como posible candidato y también Luis Arce estaría apostando a su propia candidatura, aunque no de manera explícita”, sostuvo.
Zegada considera que la división del MAS al interior de la ALP es un buen ejercicio democrático, porque durante 16 años nunca hubo una obstaculización efectiva a cualquier iniciativa legislativa que salía del partido de gobierno, “las leyes se aprobaban directamente con la mayoría que tenían ellos de manera permanente”.
El escenario actual permite una rearticulación de fuerzas políticas al interior de la ALP y le ha permitido a la oposición tener voz y posicionarse respecto, por ejemplo, a la ley del censo y el Presupuesto General de la Nación. “Son movimientos saludables dentro del Legislativo porque permiten escucharse a estas voces minoritarias incluso dentro del propio MAS, pues antes había un pensamiento monolítico, las decisiones eran monolíticas”.
La oposición tiene cierta capacidad de incidir en las decisiones, “cosa que no tenía estos 16 años, ellos ejercían su minoría testimonial, pero en ningún momento o muy esporádicamente lograban introducir una iniciativa”.
Sin embargo, Zegada alerta que, si la división al interior del MAS y también al interior Creemos se agudiza, puede presentarse un escenario peligroso para la democracia por la imposibilidad de gobernabilidad.
Para Carlos Borth, la división es evidente, pero considera que podrán reparar sus desacuerdos con miras a las elecciones de 2025 porque, a su juicio, el MAS no es una organización con ideología política, más bien responde a los intereses coyunturales. “Al interior del MAS se ha desatado una suerte de radicalidad y purismo”.
Coincide con Zegada respecto a que la oposición tenga mayor margen de participación y decisión. “Se recupera el espíritu de discutir democrática en la Asamblea”, aseguró.
El Vice llama a la unidad del MAS
El vicepresidente David Choquehuanca se refirió ayer a la división al interior de su partido y pidió superar la fisura y el sabotaje entre sus miembros, renunciar al individualismo y apoyar al presidente Luis Arce. “No apoyar la gestión de nuestro hermano Luis Arce Catacora, hablar mal de él es hablar mal de nuestro pueblo, porque el pueblo ha decidido que sea presidente, y la obligación de los ministros es trabajar con su pueblo, con ustedes”, dijo la autoridad.
Choquehuanca instó a superar los sabotaje “la división, renunciaremos al individualismo, antepondremos los intereses de la comunidad y asumamos nuestra responsabilidad”, dijo.