Trabajadores de Fassil protestan en tres departamentos y rompen diálogo con Interventor
Trabajadores del exBanco Fassil retornaron este viernes a las protestas en La Paz, Cochabamba y Santa Cruz, exigiendo el pago de sus salarios adeudados.
Los trabajadores, además, decidieron romper el diálogo con el Interventor, Luis Araoz, tras el audio en el que se escucha al funcionario ejercer presión para que se acepte su plan de pago.
"El diálogo se ha roto totalmente por los audios que él ha emitido, que han salido a la luz pública, donde indica que él se va a valer de la chicanería para pagarnos hasta en cinco años, que no nos está desvinculando y que nosotros vamos a mantenernos así en procesos judiciales hasta que le dé la gana", afirmó la dirigente Vizney Conde, en La Paz.
En Cochabamba, los extrabajadores protestaron en puertas de la ASFI, en la calle Colombia, y luego bloquearon la avenida Heroínas.
En Santa Cruz, un grupo de trabajadores partió en una marcha desde la plaza 24 de Septiembre hasta la Dirección Departamental del Trabajo en busca de respuestas a las notas enviadas a esa institución estatal, reportó El Deber.
En la ciudad de La Paz, Vizney Conde, representante de los trabajadores, expresó su indignación por las amenazas del interventor reveladas en el audio filtrado. Aseguró que los trabajadores de todas las ciudades están molestos y advirtió que tomarán nuevas medidas de presión si no se encuentra una solución este fin de semana.
"Hemos esperado mucho tiempo, le hemos dado tiempo al interventor para que se informe sobre la situación del banco, pero creo que ha sido un error dejar de ejercer presión. A partir del lunes, volveremos a movilizarnos", dijo Conde a la red Gigavisión.
Consternados por el audio atribuido al interventor Luis Gonzalo Araoz, los trabajadores del ex Banco Fassil en La Paz decidieron romper el diálogo con esa autoridad y retomar movilizaciones en demanda de que se cumpla la norma laboral y sean desvinculados de manera pronta.
En el audio filtrado, la voz que supuestamente sería de Araoz explica que se pagará las obligaciones que se tiene con los trabajadores en cuotas en plazo razonable, sin embargo advierte que en caso de llegar a un juicio, el proceso se prolongaría hasta cinco años mediante chicanas.