Diputada de Creemos denuncia secuestro de su padre por la Policía
La diputada de Creemos, María René Álvarez, denunció que su papá Gabriel Álvarez fue emboscado y secuestrado este jueves por un grupo de seis efectivos de la Policía en la ciudad de Santa Cruz, porque presuntamente estaba en posesión de un vehículo que estaba reportado como robado en Chile. Poco después logró escapar del vehículo donde se encontraba.
"Encañonaron a mi madre con el pretexto de que estaban haciendo un operativo de vehículos robados, mi padre llega hasta el lugar y habla con los supuestos policías que estaban alterados. Les dice que si hay una situación irregular que vayan a la Policía para aclarar el hecho, lo agarran y lo suben de forma violenta al vehículo y no fueron a la Policía", explicó la parlamentaria.
El hecho sucedió al mediodía, aproximadamente, a la salida del mercado San Ignacio de la capital cruceña. Los uniformados estaban vestidos de civil y se encontraban fuertemente armados.
La diputada sospecha que esta acción violenta se deba a una persecución política por la censura al ministro de Gobierno, en La Asamblea Legislativa, tomando en cuenta que ella era una de las interpelantes donde se observó el trabajo de esa autoridad.
Hasta el momento no se conoce un pronunciamiento por parte de la fuerza del orden sobre lo ocurrido con la familia de la legisladora, o cuáles son los indicios de investigación que existe en su contra.
El padre de la legisladora contó que, tras el cuestionamiento por parte de los uniformados sobre la procedencia del motorizado, les mostró el documento de Diprove que certifica que el automóvil no tenía ninguna irregularidad y no tenía reportes de búsqueda en otro país.
Empero, eso no fue suficiente porque lo subieron a su motorizado y le dijeron que iban a ir a las instalaciones de la Felcc, pero no fue así y tomaron otra ruta hacia el mercado 23 de marzo, momento donde decidió lanzarse del motorizado en movimiento.
"Me subieron a la fuerza a mi vehículo y me dijeron que me iban a llevar a la Policía, pero no fuimos a la Policía, tomaron otro camino. Apareció una camioneta blanca con seis policías fuertemente armados y cuando me di cuenta de que me estaban secuestrando, abrí la puerta y me lancé mientras ellos siguieron su camino", explicó.
Por otra parte, Álvarez reprochó la actitud que asumió la Policía cuando su padre fue a poner la denuncia por intento de secuestro, afirmó que los uniformados no le tomaron su declaración.
"Lo que nos llama la atención es que, una vez del hecho, mi padre se apersona a la Policía y no le toman las declaraciones del secuestro del que fue víctima. Evidentemente este es un hecho montado, es un móvil político", resaltó.