Carvajal, 52 años luchando por DDHH y ahora le impiden ejercer su trabajo
El Movimiento Al Socialismo (MAS) busca consolidar el sometimiento de los “derechos humanos”. Ya se hizo de la Defensoría del Pueblo, a través de elecciones amañadas, ahora sólo le falta superar el último escollo, Amparo Carvajal Baños, presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humamos de Bolivia (Apdhb), según analistas y opositores.
La activista de 84 años, que defendió por más de 50 años los DDHH en Bolivia, es hostigada por el oficialismo, pese a que incluso defendió a exautoridades masistas.
“El MAS y su gobierno quiere acallar la voz de los derechos humanos porque no quiere que se haga conocer lo que está pasando en Bolivia. Amparo Carvajal está dando una pelea digna en defensa de los derechos humanos de los bolivianos”, sentenció el abogado constitucionalista Carlos Alberto Goitia Caballero.
En ese contexto, activistas sostienen que Bolivia sufre la ausencia de una Defensoría que cumpla su rol constitucional, por lo que en el país se vive en una peligrosa situación de indefensión ciudadana, agravada por la falta de independencia de la justicia.
Amparo atacada
Al hacer una retrospectiva, se evidencia que el ex vicepresidente Álvaro García Linera recibió el apoyo de Carvajal durante su reclusión en la cárcel de San Pedro y el penal de máxima seguridad Chonchocoro por su vinculación del Ejército Guerrillero Túpac Katari (EGTK), por los presuntos ilícitos de insurrección y terrorismo.
Carvajal fue atacada desde el poder debido a que la Apdhb retiró la acusación contra el exprefecto Leopoldo Fernández, procesado por los delitos de terrorismo y asesinato en grado de complicidad por los sucesos de El Porvenir, debido a no existir indicios.
Es así que le recordó a García Linera que cuando derechos humanos visitaba las cárceles, pedían el debido proceso y respeto a los derechos humanos incluso para quienes eran acusados de terrorismo, entre ellos el exvicepresidente.
División
Por otra parte, desde hace más de una década, Amparo Carvajal tiene que enfrentar una situación delicada por acciones de división promovidas por Sacha Llorenti, miembro de la Apdhb, años antes del gobierno de Evo Morales.
Recordar que Llorenti de defensor de los DDHH pasó a ser parte de la administración de Morales, en el Ministerio de Gobierno, y caracterizó su accionar por plantear legalizar los pinchazos telefónicos, además de la represión a los marchistas del Tipnis, entre otros. Debido a estas “graves violaciones a los derechos humanos”, la Apdhb expulsó de sus filas al exministro de Gobierno y le prohibió hacer uso del nombre de la institución
Cuestionada por Morales
En 2012, tras la toma de las oficinas de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos en La Paz por gente afín al Gobierno, el entonces presidente Evo Morales sostuvo que no se siente protegido por las instituciones de los Derechos Humanos.
“Cuando era dirigente los derechos humanos eran grandes defensores, quisiera que sigan ahora, quiero decirles a esas instituciones cuando tengo tanta humillación, provocación, no me siento defendido por los derechos humanos, yo también soy ser humano, tengo derechos, tengo bastante que comentar”, dijo en esa oportunidad.
Carvajal llegó a Bolivia el 1 de noviembre de 1971, siendo mercedaria de Bérritz, y desde ese periodo se encuentra en el país. En 1980 dejó la congregación. El año 1976 fue una de las cofundadoras de la Apdhb, que reemplazó a la Comisión Episcopal de Justicia y Paz, dependiente de la Iglesia católica.
Morales y el uso de los DDHH
Tras casi 12 años de haber asumido el cargo de presidente, Evo Morales mostró su intención de perpetuarse en el poder, bajo el argumento de que las organizaciones sociales se lo pedían.
Para el efecto, se promovió un referendo constitucional para modificar la Constitución para habilitarse a un nuevo proceso electoral que le fue adverso.
Luego del fracaso, Morales a través de sus asambleístas y otros, acudió al Tribunal Constitucional para pedirle que elimine el límite a la reelección, debido a que afectaban sus derechos humanos.
Toma de la Apdhb en 2014
En 2014, la presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb), Yolanda Herrera, informó que la institución se declaró en estado de emergencia, luego de que un grupo, liderado por Teresa Zubieta, irrumpió en la sede donde se realizaba el vigésimo Congreso Ordinario de la Asamblea de Derechos Humanos de La Paz, conjuntamente movimientos sociales afines al Movimiento Al Socialismo (MAS).
Zubieta recibió su premio en este gobierno, toda vez que fue designada como embajadora ante el Vaticano.