Gobierno señala que sólo 11 empresas mineras que operan en Madre de Dios tienen licencia
El ministro de Medio Ambiente y Agua, Rubén Méndez, admitió que no realiza control de la minería ilegal que se practica en gran parte del río Madre de Dios. Resaltó que sólo monitorea el trabajo de 11 cooperativas que cuentan con licencia ambiental.
El viernes, el Ministerio de Gobierno, el Ministerio Público y la Autoridad Jurisdiccional Administrativa Minera (AJAM) ejecutaron un operativo que luego de 18 horas terminó con la aprehensión de 57 personas y la destrucción de 27 dragas y balsas que contaminaban con mercurio el río Madre de Dios al explotar de forma ilegal el oro.
El ministro Méndez informó que sólo 11 cooperativas cuentan con licencia ambiental para que puedan operar legalmente en la extracción del oro en el río Madre de Dios.
"Estas 11 cooperativas están siendo monitoreadas y controladas en todas sus actividades que realizan en el tema del manejo del mercurio, en el tema del manejo de sus pasivos ambientales, como son sus desmontes y su material descartable que hay en el proceso de la concentración de oro. Sin embargo, río más arriba, en el Madre de Dios, habían existido algunos operadores mineros sin ningún derecho de operaciones, a los cuales nosotros, como Ministerio de Medio Ambiente, no los controlamos, no hacemos tampoco el seguimiento. Llegaron denuncias, evidentemente, y ahí están las consecuencias de la intervención", sostuvo Méndez.
Las 11 cooperativas tienen sus balsas afiliadas a la Asociación de Balseros (Asabal), pero el Centro de Estudios Jurídicos e Investigación Social (CEJIS) resaltó que más de 300 balsas contaminan el río Madre de Dios porque practican la explotación ilegal del oro.
La misma institución indicó que el río Madre de Dios es contaminado con aproximadamente 432 kilos de mercurio cada año por la explotación de oro, como consecuencia, muchos indígenas comenzaron a registrar niveles altos de intoxicación. El ministro de Medio Ambiente y Agua explicó que las mineras autorizadas se comprometen con un manifiesto ambiental que prohíbe el desecho del mercurio sobre el río y promueve el sistema de "retorta".