Evo asegura que no negoció votos con Manfred y denuncia alianza para inhabilitarlo nuevamente
El expresidente Evo Morales rechazó las revelaciones del vocero presidencial Jorge Richter ratificadas por el alcalde de Cochabamba, Manfred Reyes Villa, en sentido de que, en 2002, el MAS pidió los votos de NFR para lograr la presidencia luego de salir segundo en las elecciones generales, según Asuntos Centrales.
Morales aseguró en su programa dominical en radio RKC que hay una estrategia desde Estados Unidos para inhabilitar su candidatura presidencial y alertó que “toda la derecha” está en campaña para afectar sus aspiraciones políticas.
“Mienten, yo nunca negocié los votos de NFR. Más bien, a mí me presionaron aquí en la sede de la Federación para que yo vote por Manfred”, indicó tras relataron que la presión provino de una periodista enviada por NFR.
Morales mostró un recorte del diario Los Tiempos en el que él aseguraba que “el voto digno no se negocia”.
“De dónde se inventan que hemos negociado, por qué son tan mentirosos”, dijo Morales en alusión a las versiones de Richter y Reyes Villa en sentido de que el líder cocalero había pedido los votos de NFR.
Morales reconoce que sí había visitado al entonces alcalde Reyes Villa, pero para pedir que la Alcaldía compre fruta del trópico en lugar de galletas de Argentina, según el portal Asuntos Centrales.
El exmandatario recordó que el exembajador de Estados Unidos, Manuel Rocha, fue el encargado de juntar al MNR y al MIR, a través de Carlos Sánchez Berzaín y Óscar Eid, para evitar que el MAS llegue al poder.
“En ese momento, yo rogaba que el Imperio no nos haga presidentes, porque iba a ser peor, no íbamos a aguantar ni seis meses. No estábamos preparados y solo teníamos 27 diputados y solo 8 senadores, lo que hubiese hecho imposible gobernar”, indicó.
“Dicen que les ofrecimos medio gabinete, esa es otra mentira más”, dijo Morales tras recordar que en 2001 la Megacoalición lo expulsó del Congreso “por instrucción de Estados Unidos”.
Ahora, como entonces, dijo Morales, “el plan es inhabilitar a Evo Morales para las próximas elecciones poniendo trabas al Congreso del MAS-IPSP”.
“Lo peor es que el Gobierno de Luis Arce Catacora se junta con la derecha para atacar a Evo y al movimiento indígena, y al MAS-IPSP”, advirtió.