Franklin Molina: “La producción de la planta generará divisas que necesitamos”
El pasado viernes el Gobierno boliviano inauguró la primera planta industrial de carbonato de litio, abriendo así la posibilidad de producir este importante recursos para la transición energética a gran escala. Los Tiempos conversó con el ministro de Hidrocarburos y Energía, Franklin Molina, sobre este importante para la economía nacional, las dificultades que aún se presentan y las críticas que existen sobre la falta de transparencia que se tiene con los convenios con empresas extranjeras.
La autoridad señaló que pese a las críticas se desmotró que el Estado boliviano puede poner en marcha una factoría de estas características e indicó que se espera que la industria del litio se constituya en una fuente de divisas que el país necesita con urgencia.
- ¿Cómo califica esta inauguración?
- Es un hecho histórico para el país. A partir de ayer, la planta con una capacidad de 15.000 toneladas de carbaonto de litio por año está comenzando a producir carbonato de litio en grado técnico y también producirá grado batería.
Creemos que esta planta no sólo cambiará la vida de la gente de la región, sino también de la economía de nuestro país ya que al generar ingresos por exportaciones nos permite también la generación de importantes divisas que son muy necesarias para el Estado.
Esta planta ha sido reconfigurada luego que nosotros ingresamos al Gobierno. A fines del 2020 y principios del 2021 lo único que se tenía era los recursos desembolsados pero no el avance de la obra.
Nos dimos cuenta que a planta no iba a arrancar en las condiciones que se había dejado. Se hizo un arduo trabajo para terminar de construirla.
- ¿Se tiene algún avance en la auditoría que hace YLB para identificar responsables y la cantidad de recursos adicionales desembolsados?
-YLB lleva adelante primero la auditoría sobre la ingeniería del proyecto. Uno de los elementos identificado es que no había la materia prima suficiente para la produción. Por lo tanto, la obra comenzó con 669 millones de bolivianos, finalmente el monto final concluyó con 767 millones, casi 100 millones más que se tuvo que ejecutar.
Pero esta obra que inició en 2018 no se hubiera concluido con el presupuesto inicial. Si no tenemos materia prima suficiente no podremos elevar la capacidad de planta.
YLB ahora realiza todos los esfuerzos para subir la producción y capacidad de las piscinas de evaporación.
- ¿La materia prima vendrá sólo de las piscinas?
-Se demora como dos años para obtener materia prima específica para la planta; por lo tanto, YLB tiene la misión de trabajar en identificar técnicas que nos permitan acelerar ese proceso.
Esperamos que si todo marcha bien el próximo año podamos tener buenas novedades respecto a este factor que es tener la materia prima suficiente.
- Entendemos que la planta comienza con una producción de más o menos 2 toneladas por día, cuando su capacidad máxima es de casi 41 toneladas por día. ¿Se puede afirmar que con este nivel se produce a escala industrial?
-La planta ya tiene una escalabilidad insutrial. Si se tiene 3.000 toneladas por año ya se puede considerar que estamos hablando de ese ritmo, y la planta tiene el potencial para ello.
En todo el mundo las plantas de este tipo no empienza a producir a plena capacidad.
- ¿Para cuándo se prevé tener un contrato de venta continua con un consumidor final?
- Hay distintas formas de comercialización: unas son contratos a futuro, otras contratos para producción “spot”, es decir, se produce hoy y al precio de mercado ya se pueden concretar las ventas. Entiendo que el equipo de ventas de YLB está precisamet en esa parte.
- Actualmente se produce carbonato de litio en grado técnico, ¿qué hace falta para alcanzar el grato batería y qué beneficios extra se obtendrían con mayor pureza?
-El grado técnico es 98,5 por ciento de pureza, y el grado batería es 99,5 por ciento, es mínima la diferencia.
El valor económico es también mínimo, por lo cual no significa que haya un efecto muy importante en el precio final del carbonato de litio. Por lo tanto, los próximos pasos que tiene que hacer YLB es hacer los ajustes para llegar a esta calidad y comercializar la producción con esas características.
- Con relación a los convenios firmados con empresas extranjeras para implementar la Extracción Directa de Litio (EDL) hay críticas, porque los mismos no se hicieron públicos. ¿Hay la posibilidad de difundir estos convenios?¿Cómo ve estas críticas?
-Yo creo que las críticas lo que buscan es perturbar el proceso. Lo mismo tenemos en el área petrolera, cuando se firman contratos hay aspectos de confidencialidad.
Pero más allá de eso lo que improtan es la concreción y finalización de los contratos. Creo que hay mucha gente tratando de hacer política con este tema.
Hemos visto en distintos medios que tratan de vincular inclusive seudo intereses. Y lo que más bien hay es intereses económicos para tratar de empañar algo que nosotros ya habíamos presentado en su momento.
Las convocatoriasy los resultados fueron transparentes. Los acuerdos también son de conocimiento público. Se informaron los montos de inversión, condiciones y los aspectos técnicos, creo que eso es parte de la transparencia.
Hay algunos aspectos de los convenios y contratos que no se los va a poder revelar porque son básicamente la patente, es decir el factor tecnológico.
- ¿Quiere añadir algo?
-Si bien hoy comenzamos a producir con un factor de planta y una capacidad de 3.000 toneladas por año, se espera que ya desde el 2024 comencemos a superar estos parámetros.
Se hacía muchas críticas sobre que Bolivia no iba a materializar la industrialización por cuenta propia, que era imposible que el país llegue a desarrollar una indutrialización en materia del litio a nivel industrial. Pero el viernes se demostró que los bolivianos podemos.
Esto nos permitirá avanzar con este recurso estratégico y convertirlo en pilar para la economía nacional. Hoy Bolivia ingresó ya dentro de los países que producen litio en el mundo.