Jorge Richter: “Las prórrogas excepcionales están para encontrar salidas institucionales”
El vocero presidencial Jorge Richter atribuyó a la fractura interna del Movimiento Al Socialismo (MAS) la inviabilidad de las elecciones judiciales y acusó al expresidente Evo Morales de ser responsable de conflictuar el país para sacar rédito en el diálogo que se instale en las próximas horas.
Los Tiempos.- ¿Qué salida ven desde el Gobierno para resolver la crisis judicial e institucional?
Jorge Richter.- La salida tiene que ser en el marco que nos da las posibilidades del diálogo y la generación de consensos, se debe resolver en la Asamblea Legislativa.
El Gobierno de Luis Arce no tiene posibilidad ni de emitir un decreto para modificar la situación en el poder judicial porque es un Órgano del Estado absolutamente independiente con una metodología y tratamiento específico; allí no interviene el poder Ejecutivo. En la Asamblea Legislativa también se califica a las personas en condiciones aptas para ser candidatas a las magistraturas del poder judicial y, como la Asamblea Legislativa es un cuerpo colegiado, la decisión se tiene que consensuar y dialogar.
Será que los que están bloqueando tienen ánimo de ir al diálogo para construir un consenso y ser pacientes hasta encontrar un punto de coincidencia entre todos los que están representados o sólo tienen fortaleza para salir a las carreteras, bloquear, exacerbar los ánimos y generarle pérdida económica al país.
LT. ¿Desde el Gobierno existe la intención de prorrogar a los magistrados?
JR. Quien mandó en consulta una interpretación respecto del proyecto de preselección de la cámara de Diputados fue Creemos, no el Movimiento Al Socialismo (MAS).
Ahora, ante la presión que existe en el país, van a tener que encontrar una solución porque no hay otro poder que lo haga por ellos.
Mientras ellos buscan una solución, no era una alternativa dejar a la deriva lo judicial. Eso no es serio. No hay Estado que no tenga su sistema de justicia funcionando.
En la Constitución Política del Estado de 2009, en las disposiciones transitorias, dice que las elecciones generales se llevarán a cabo en diciembre de 2009 y en otra dice que las elecciones municipales y departamentales será el 4 de abril de 2010.
Otra dice que se prorroga el mandato de alcaldes, concejales, prefectos excepcionalmente hasta la posesión de las nuevas autoridades. Se los prorroga cerca de cuatro meses, su mandato era hasta enero y estuvieron hasta abril porque se estaba dando una solución institucional a la emergencia de la nueva Constitución.
Entonces la gente de Evo Morales no protestó porque eso los beneficiaba; y en esas disposiciones también señalaba que el primer mandato o los anteriores se computaban para las elecciones venideras. En ese momento, Evo ya tenía un mandato y con las de 2009 y en 2014 ya no podía ser candidato.
Sin embargo, pidió una interpretación al TCP, es decir, hizo caso omiso a la CPE y se prorrogaron las autoridades del país.
Y en 2020 se prorrogan las autoridades con la señora Áñez para poder encontrar una solución constitucional para que el país vaya a elecciones nacionales y él fue parte de ese acuerdo.
Entonces las prórrogas excepcionales están en el país para encontrar salidas institucionales y encausar el país a la norma constitucional.
Y ahora que se da una prórroga excepcional, no le gusta (a Evo Morales). En los hechos reales, está luchando por un capricho de fijaciones personales para ser nuevamente candidato.
LT. ¿Qué frenó las elecciones judiciales?
JR.- Son varios factores. El primero es que Bolivia vive una extrema polarización de alcances muy sensibles y preocupantes.
Antes se expresaba en MAS y anti MAS y ahora es un triángulo en que están enfrentados el antimasismo, una facción que respalda al presidente Luis Arce y otra facción que respalda a Evo Morales.
Entonces la polaridad en el país es más compleja y se ha trasladado y se refleja en la Asamblea Legislativa. Allí todo lo que se trata no logra consenso, más bien se confronta.
LT. ¿Es legítima la demanda de los bloqueadores?
JR.- Nos preguntamos cuál es el verdadero trasfondo del conflicto, si es efectivamente una preocupación genuina (de Evo Morales) por la institucionalidad de la justicia en Bolivia, si es una preocupación sobre la composición de las diferentes magistraturas en nuestro país o la búsqueda de alguna posibilidad de construir procesos que lleven a contar con magistrados que nos garanticen la debida transparencia de la justicia; o hay alguna otra intencionalidad que tiene más relación con los afanes y ambiciones personales de asegurarse una candidatura que hoy en día le impide el Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) con el fallo que todos conocemos.
Entonces, estas manifestaciones, protestas y bloqueos están conduciendo únicamente a buscar una solución de orden político que les permita tener un control sobre una nueva composición el TCP y, con esa nueva composición, esos nuevos magistrados puedan revertir el fallo del TCP.
Es importante cuestionarnos cuál de los dos elementos disparó los bloqueos inclementes en el eje del país que están buscando daño; no sólo económico, sino daños a bolivianos que necesitan trabajar, trasladarse y transportar su mercadería.
Nosotros entendemos que la intencionalidad está en la habilitación de su candidatura, en los intereses personales y electorales del grupo del expresidente y de él mismo y están usando de fachada esta supuesta preocupación que tienen respecto de la institucionalidad de la justicia, decimos supuesta preocupación porque en el pasado inmediato fueron quienes más han torturado la justicia para poder moldearla a unos fallos, a unas sentencias, a unas interpretaciones que los beneficien y que todos conocemos.
LT.- ¿Entonces confirma que los magistrados carecen de independencia?
JR.- Sin lugar a dudas, hay políticos y autoridades que, en el ejercicio de su poder o desde su posición, entienden que tienen que controlar todas las instituciones. El control de la institucionalidad se hace muy evidente en la persona del expresidente, y hoy en día busca, a través de los bloqueos y de la situación caótica que quiere generar en el país, una renuncia masiva de todos los magistrados para que, acto seguido, el país quede paralizado en términos judiciales y en esa parálisis del poder judicial haya una solución de orden político.
Esa salida política con nuevos magistrados sería la forma para que él, sin estar en la Presidencia del Estado, pudiese tener incidencia directa sobre un órgano del Estado. Lo hizo varias veces en el pasado y está replicando una fórmula que necesita un escenario de caos, de crisis, tensión de crispación de los ánimos políticos y de la indignación colectiva, en la que la emergencia lleve a una negociación de orden político.
politólogo
Trayectoria de Jorge Richter
Richter es politólogo y comunicador social y se especializa en comunicación política y análisis de escenarios.
Jorge Richter participó como colaborador del Juguete Rabioso en enero de 2001, cuando escribió un artículo sobre todos los entretelones del conflicto entre dos políticos ya desaparecidos, Walter Guiteras, controvertido dirigente beniano, y Raúl Garafulic, ruidoso propietario del matutino La Razón.