Agropecuarios piden créditos blandos y advierten con subir precios de productos
Los 16 días de bloqueo de carreteras en Cochabamba han dejado a los productores agropecuarios al borde de la crisis. Piden al Gobierno nacional créditos blandos para repoblar granjas, comprar insumos y revertir el daño; además, exigen una ley que los proteja.
Los productores de pollo, cerdo, leche y banano coinciden en que la reprogramación de créditos no es suficiente para reponerse del daño económico y piden más apoyo.
De no concretarse mayor ayuda, advierten, muchas unidades productivas podrían cerrar y otras se verían obligadas a elevar el precio de sus producto para recuperarse.
Ése es el caso de los porcinocultores, que para salir de la crisis anunciaron un posible aumento del kilo de carne de cerdo hasta en 10 por ciento. La escasez de alimentos causó que los animales pierdan peso y ahora se debe inyectar capital para engordar a los cerdos. Todas estas demandas serán remitidas al Gobierno en un pliego petitorio.
“Se debe crear fondos para el resarcimiento de daños, entrega de créditos y una ley de protección al sector productivo contra los bloqueos, además de reajuste de costos de producción para fijar nuevos precios de los productos. Si no hay apoyo del Gobierno, vamos a reajustar precios. Sería una forma de recuperarnos del daño”, dijo el presidente de la Asociación de Porcinocultores de Cochabamba, Álvaro Laime.
El representante de los productores lecheros Mario Mercado indicó que están en negociaciones con PIL para que se les otorgue un crédito financiero que les permita comprar insumos. “Muchos ya tienen diferimientos de créditos productivos con aval de PIL, es complicado nuestro acceso a créditos”, sostuvo.
Mientras que los bananeros no tienen liquidez, pues el bloqueo les causó un daño de 56 millones de bolivianos y los importadores argentinos les adeudan 17 millones de dólares desde hace cinco meses. Esto causa que el sector no pague salarios y tenga deudas con sus proveedores desde hace 15 semanas.
Por su parte, los avicultores perdieron 60 millones de bolivianos y gestionarán créditos con sus entidades financieras. “No esperamos que el Gobierno nos vaya a colaborar”, señaló el vicepresidente de ADA, Iván Carreón.
