Las tres etapas del censo se extienden por casi cinco años
El Censo Nacional de Población y Vivienda es un proceso complejo de tres etapas, del cual su fecha más importante es la jornada censal de este 23 de marzo.
Las etapas que componen este proceso son las siguientes: precensal, censal y poscensal. El proceso comenzó en 2021 con la actualización cartográfica y se extenderá hasta 2025 con la presentación de los resultados finales.
La primera etapa comenzó hace más de tres años, en 2021, con la actualización cartográfica que consistió en que personal del Instituto Nacional de Estadística (INE) recorrió todo el país para conocer el número de viviendas ocupadas, desocupadas y colectivas existentes. Además, sirvió para actualizar los nombres propios de lugares, georreferenciando mediante coordenadas de las comunidades.
También forma parte de esta etapa la elaboración del cuestionario censal, que, luego de un periodo de consultas, se aprobó y puso a prueba. Son 59 preguntas divididas en siete capítulos, con distintas temáticas que van desde datos demográficos hasta temas de salud. El proceso duró casi tres años (2021-2023) y tuvo el apoyo de organismos, como la ONU, OIT, Celade, e institutos estadísticos de otros países.
Un hito en este proceso fue la conformación del Instituto Abierto, en septiembre de 2022, que se convirtió en el punto de recepción, sistematización de comentarios, sugerencias y propuestas de preguntas para la boleta censal.
Posteriormente, se realizó una prueba piloto a 429 personas en cuatro municipios: Machakamarca, en Oruro; San Ramón, en Beni; Villa Serrano en Chuquisaca, y en el Ayllu Yura de Potosí.
El censo experimental, que fue el punto culminante de esta etapa, se realizó el 29 de julio en la población cochabambina de Capinota. Sirvió para aplicar el censo en menor escala y para poner a prueba todos los procesos, procedimientos, sistemas e instrumentos y los tiempos para estar mejor preparados para el día del censo.
La etapa censal es la más corta pero la más intensa del proceso. Inició a fines de 2023 y culminará pocos días después del 23 de marzo. Esta fase incluye el reclutamiento de voluntarios, su capacitación, la distribución del material censal, la jornada del censo (el Día “E”) y el retorno de la documentación censal. En algunas zonas el empadronamiento de los datos durará hasta tres días, por temas de acceso y distancia o por cuestiones de desastres naturales.
La tercera etapa es la poscensal. Es cuando se escanea, digitaliza y procesa toda la información recogida el día del censo. Se procesan los resultados para su posterior difusión, a través de distintos medios.
Según el INE, en esta etapa se realiza el desplazamiento de la documentación censal ordenada (cuestionarios y formularios de recuento preliminar llenados), para luego comenzar la digitalización (captura de datos recogidos por los censistas), la codificación, tratamiento de datos, estructuración de la base de datos y, posteriormente, la difusión de los resultados expresados en estadísticas e indicadores sociales, según las temáticas incluidas en el cuestionario censal.
El director del INE, Humberto Arandia, informó que el procesamiento de los datos se realizará con base en un software especializado y con ayuda de la inteligencia artificial.
En esta etapa, mediante una encuesta se medirá la cobertura del censo, como parte de los procesos de medición de calidad.
Los resultados preliminares se conocerán a finales de agosto de 2024, según confirmó el presidente Luis Arce, el pasado martes.
Con estos resultados preliminares, el Órgano Electoral Plurinacional (OEP) elaborará el proyecto de redistribución de escaños parlamentarios, según los datos poblacionales de cada departamento.
Otro de los objetivos de la presentación de datos preliminares es que se avance en un nuevo Pacto Fiscal para la distribución de recursos a todas las entidades del Estado.
El INE se comprometió a entregar estos resultados preliminares el 30 de agosto de este año, como los datos de población por departamento, que serán la base para la distribución de recursos y de escaños con miras a las elecciones presidenciales de 2025.