Bolivia se ausenta de la sesión de la OEA que exige transparencia en las elecciones de Venezuela
Bolivia decidió no participar en la sesión extraordinaria del Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) celebrada este viernes, en la que se aprobó una resolución solicitando la publicación de las actas de las recientes elecciones presidenciales en Venezuela.
La Cancillería boliviana, a través de un comunicado, explicó que la decisión fue comunicada formalmente al organismo internacional por medio de una carta enviada el 13 de agosto por el embajador Héctor Arce Zaconeta.
En la misiva, dirigida al presidente del Consejo Permanente de la OEA, Bolivia dejó claro que no participará en ninguna sesión relacionada con las elecciones en la República Bolivariana de Venezuela, argumentando que dicho país dejó de ser miembro de la organización hace más de cinco años
"Por lo que la OEA ya no cuenta con competencia para pronunciarse sobre asuntos vinculados a este país; entendimiento que es acorde a lo dispuesto en el artículo 143 de la Carta Constitutiva de la organización", expresa el comunicado oficial.
La postura de Bolivia, que también rechaza cualquier forma de injerencia en asuntos soberanos de otros países, se basa en los principios del derecho internacional, reafirmando su compromiso con la soberanía y la autodeterminación de los pueblos.
La resolución insta al Consejo Nacional Electoral (CNE) a que "publique de manera expedita las actas con los resultados de la votación de las elecciones presidenciales a nivel de cada mesa electoral" y "respete el principio fundamental de la soberanía popular a través de una verificación imparcial de los resultados que garantice la transparencia, credibilidad y legitimidad del proceso electoral".
Su llamamiento se une al que también efectuaron este viernes la Unión Europea, entre ellos España, y 22 países más, en favor de la "inmediata publicación de todas las actas originales" de las elecciones y la verificación "imparcial" e "independiente" de los resultados de esos comicios, en los que según el CNE el presidente Nicolás Maduro se impuso al opositor Edmundo González Urrutia.
La resolución de la OEA resalta también la importancia de "proteger y preservar todos los equipos utilizados en el proceso electoral, incluyendo todas las actas y resultados impresos, a fin de salvaguardar toda la cadena de custodia" de dicho proceso.
Asimismo, solicita proteger las instalaciones diplomáticas y al personal residente en territorio venezolano, incluidas las personas que soliciten asilo en tales instalaciones.
Llama también a las partes interesadas a "abstenerse de cualquier conducta que pueda comprometer la construcción de una salida pacífica de esta crisis, respetando la voluntad soberana del electorado venezolano".
El Consejo Permanente apostó porque sea "una prioridad absoluta y una obligación para Venezuela" respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales, (...) especialmente el derecho a reunirse pacíficamente y al ejercicio pleno de los derechos civiles y políticos sin represalias, el derecho a no ser sometido a detenciones ni encarcelamientos arbitrarios y el derecho a juicio imparcial".
"Mostremos al pueblo de Venezuela que no está solo", dijo al inicio de la sesión el embajador de Estados Unidos ante la OEA, Francisco Mora.
Estuvieron ausentes en la votación los representantes de México, Bolivia, Honduras y San Vicente y las Granadinas.
"Salir de la dictadura requiere el esfuerzo de todos. Obviamente que requiere una interlocución firme que sea clara de que no es permisible una dictadura ni un día más", dijo el secretario general de la organización, el uruguayo Luis Almagro.
En su discurso al término de la sesión, expresó su deseo de que "los esfuerzos por lograr una transición democrática den sus resultados, resultados que no han tenido hasta ahora". "Ojalá el interlocutor al lado del régimen por una vez actuara con buena fe", dijo.
Almagro hizo un llamado de atención a los integrantes del organismo: "Aquí todos sabíamos lo que iba a pasar y debíamos estar preparados, y aquí todos sabemos lo que está pasando y debemos actuar en consecuencia".
El pasado 31 de julio había fracasado en ese organismo panamericano con sede en Washington otra resolución que exigía la difusión de inmediato de las actas electorales.
Ese primer texto contó con 17 votos a favor, ninguno en contra, 11 abstenciones y cinco ausencias, de manera que no logró la mayoría absoluta necesaria para salir adelante.
Rompió la votación en esa ocasión la frase que impulsaba a efectuar "una verificación integral de los resultados en presencia de organizaciones de observación independientes para garantizar la transparencia, credibilidad y legitimidad de los resultados". En el texto aprobado ahora no fue incluida.