Anulan cables sueltos y tapan cámaras en el 90% de las plazas y parques
Este año, una niña (10), un varón (46) y un can perdieron la vida al recibir una descarga eléctrica de cables que estaban sueltos y cámaras de cables que estaban descubiertas en plazas, parques y calles de Cochabamba. A raíz de esta tragedia, el director de Alumbrado Público de la Alcaldía, Raúl Plaza, aseguró que se anularon los cables sueltos y se taparon las cámaras descubiertas en el 90 por ciento de las plazas y parques de la ciudad con el fin de eliminar los riesgos.
Diversas situaciones pueden dar lugar a la caída de cables en la vía pública. La falta de material, choque de vehículos con estructuras, caída de árboles, incendios y el paso de grúas u otros vehículos de alto tonelaje son algunas de las posibles causales.
“De algunos cables procedemos a la anulación por el tiempo de uso; lo único que queda es eliminar riesgos. Ya estamos en un 90 por ciento, los que estamos haciendo es subsanar. Las tapitas estamos haciendo soldar. El sol, el viento y la lluvia lo resecan y para sacar se destroza todo; entonces estamos procediendo a sacar”, dijo Plaza.
Remarcó que hay varias áreas verdes que tienen cables sueltos y cámaras descubiertas, por lo que recomendó a las OTB tomar en cuenta este tipo de falencias cuando elaboren el Programa Operativa Anual (POA).
“Si en un parque alguna rama cae, revienta cables y eso no es culpa de nadie; no, es un tema climatológico y por inclemencias llegan hasta caerse y reventar cables, y estos cables quedan expuestos (colgados), presentando riesgos para las personas y mascotas”, explicó.
Pidió a las personas que, si ven estos cables, llamen a Alumbrado Público para que acudan al lugar y den soluciones. “A cualquier reclamo, nosotros directamente acudimos, esto directamente para eliminar todo riesgo”, añadió.
El mayor peligro es la electrocución por contacto directo con el cable, que en el caso de la alta tensión puede darse incluso a través del aire, por lo que es necesario mantener una distancia mínima, que debe ser mayor en un 10 por ciento a la distancia de los aisladores que soportan el cable.
Casos lamentables
Camila Fernanda Caballero (9), el 5 de marzo, jugaba con otros niños en la plazuela de la OTB La Joya, al sur de Cochabamba. En sólo segundos recibió una carga eléctrica al tener contacto con cables que estaban en una de las cámaras sin tapa.
La madre relató que acompañaba a su hija, quien patinaba por el lugar. Al ver a un grupo de jóvenes bailando para un grabar un video de Tik Tok, ella se quitó los patines y se puso sandalias para ir junto a ellos. Sin percatarse, tocó los cables sueltos y recibió una descarga eléctrica mortal.
“La estaba mirando, mientras estaba bailando y en segundos pasó esta desgracia. Yo pido justicia por mi hijita”, dijo la madre en medio de lágrimas.
“Estaba con vida, abrió su boquita, ha respirado y pedí que me lo atiendan a mi hijita. Los doctores se movilizaron, pensé que iba a despertar mi hijita y ahí se fue mi hija”, contó.
La mujer, en ese tiempo, dijo que presentaría una denuncia contra quien instaló el alumbrado público dejando los cables sueltos sin medir los riesgos. “Quiero que se pudra en la cárcel la persona que ha instalado. Nunca entregan proyectos bien hechos”, añadió.
Un día después de la tragedia de Camila Fernanda, en el parque Fidel Anze, al norte de Cochabamba, un hombre que paseaba con su perro por la jardinera se topó con un cable que estaba carca de un árbol. Lamentablemente el can recibió una descarga eléctrica que le quitó la vida.
“Es la mascota de mi hermana y cuñado. Como todas las mañanas, lo sacaron a pasear. Mi cuñado estaba sentado, de repente escuchó los alaridos del perrito, lo encontró prácticamente agonizando, tuvo que sacar el cable con su mano para poder rescatarlo”, contó Sergio Apaza, el hermano de la dueña del can.
El cable que causó el deceso del perro estaba enredado en el árbol, y sería de un poste de alumbrado público. “Esta vez fue la mascota de mi hermana; pudo ser otra persona, un niño o mi propio cuñado el que sufra la descarga eléctrica”, aseveró Apaza.
Dieciocho días después, otra tragedia enlutó a Cochabamba, nuevamente a causa de los cables sueltos y cámaras descubiertas.
El 24 de marzo, al ingreso de K’ara K’ara, al sur de Cochabamba, Hugo V. (45) se encontraba junto a su hijo esperando un vehículo y, en cuestión de segundos, sin percatarse, pisó un cable que estaba suelto de un poste de alumbrado público.
La descarga eléctrica fue letal, pues Hugo perdió la vida de manera instantánea.
“Había agua junto al poste y mi papá piso el cable sin darse cuenta”, relató el hijo que presenció la muerte de su progenitor .
A raíz de estas desgracias y grandes pérdidas, los vecinos de la zona mostraron su molestia y pidieron justicia, ya que los cables estuvieron sueltos durante varias semanas.