Infanticidios de César y Daniel: las vidas de dos pequeños que pudieron salvarse
El trágico final de César (4) y Daniel (2) pudo haberse evitado si la Fiscalía de El Alto -hace dos años- hubiera procesado a César Tezanos Pinto (32), padre y verdugo de sus propios hijos. Este hombre fue denunciado en 2022 por Silvia Tarqui (35), madre de los pequeños, por violencia ejercida en su contra, pero el Ministerio Público determinó liberar de toda culpa a quien después decidió terminar con la vida de los niños de la manera más cruel.
Todo ocurrió la noche del pasado lunes, cuando César acudió con una pizza, una gaseosa y bebidas alcohólicas a la casa donde vivía Silvia junto con sus dos hijos. “Ellos estaban felices”, contó la madre recordando el tráfico día, pero todo cambió cuando empezó a agredirla y causarle el primer corte a uno de sus hijos.
“Los cuidé como más pude, incluso renuncié a ellos, como tanto me luchó por tener la guarda (le dije) son tuyos, voy a desaparecer, me iré; pero lleva al cesarito al hospital. Grité con todas las fuerzas, (pero) me agarró a patadas”, es parte del relato de la madre de los niños y expareja de César Tezanos.
Ella recuerda que vivió un infierno los últimos años porque el padre de sus hijos primero no quería saber nada de ella ni los niños, ni siquiera paga las pensiones; pero de repente se interesó por ellos y peleó en instancias judiciales por obtener la custodia.
Denuncia “inútil”
Para respaldar su denuncia en 2022, Silvia presentó un certificado forense, pericias psicológicas, informe del policía investigador asignado al caso, entre otros; pero no fue suficiente para la fiscal Selma Soledad Yapu Limachi quien meses después emitió un requerimiento conclusivo de sobreseimiento.
La activista María Galindo señaló que el Ministerio Público se respaldó con “documentos ridículos” para tomar esa decisión y beneficiar a Tezanos, como un certificado de antecedentes de no violencia emitido por el Rejav y “usted sabe que no son certificados responsablemente entregados por el Estado”, dijo a Urgente.Bo.
“Cuánto vale la vida de los niños y de las mujeres”, preguntó Galindo a Yapu, de quien se sabe que ya no trabaja en la Fiscalía de El Alto, pero continúa en la institución pública en ese departamento.
La activista señaló que si la fiscal hubiera actuado profesionalmente y hubiera aceptado las pruebas presentadas por Silvia, “hoy esos niños estarían vivos”.
Esta determinación de la fiscal Yapu dio paso a que Tezanos Pinto iniciara una serie de procesos a Silvia, entre ellos, por violencia hacia sus hijos, por utilizar documentos “falsificados”.
“A la mamá, el Estado de Bolivia le ha fallado, el Gobierno Municipal de El Alto le ha fallado”, dijo la activista María Galindo.
Proceso contra la fiscal
La abogada de Mujeres Creando, Heidy Gil, dijo a Los Tiempos que esta jornada tiene previsto presentar una denuncia contra Yapu por incumplimiento de deberes en casos de violencia. Adelantó que se busca su destitución, pero al mismo tiempo una sanción penal que marque un antecedente.
Este medio se comunicó la Coordinadora de la Fiscalía de La Paz para conocer cuál es la situación de Yapu y qué medidas está asumiendo esa institución tras conocer la denuncia que hizo la madre de los niños fallecidos y el colectivo Mujeres Creando. Respondió que no estaba autorizada para responder y que se debería acudir a la Unidad de Comunicación de la Fiscalía.
Se prevé que hoy se conozca el proceder de la Fiscalía en relación al accionar de Yapu, pero lo cierto es que ninguna acción devolverá sus hijos a esta madre. “Sinceramente, yo también quisiera haberme ido con mis bebés, han sido las imágenes más horribles”, fueron algunas de las palabras que Silvia expresó a través de las redes sociales.
Crimen
“Su mamá sabía lo que César tenía planeado para hacer”
A través de un video, Silvia Tarqui, la mamá de los niños asesinados por su propio padre en la ciudad de El Alto, reveló detalles de lo sucedido la madrugada del martes 5 de marzo en su domicilio. Además, dijo que la madre de César Tezanos Pinto sabía que su hijo había planificado asesinar a sus hijos.
“Como nunca, me llamó la mamá de César, varias veces, ella no llamaba jamás, ni siquiera para preguntar si los bebés están sanitos, si han comido o algo, ni en los cumpleaños para felicitarles. Extrañamente, esa noche llamó varias veces. Al día siguiente, cuando vino a mi casa a recoger a César, me gritó: ‘Tú tienes la culpa. Yo vine aquí, he pasado tres veces a las 11 de la noche’. Su mamá sabía lo que César tenía planeado para hacer”, agregó.
La activista María Galindo denunció que los padres del infanticida son jubilados militares y -según ella- influenciaron en la justicia para que su hijo no sea procesado antes.
César Tezanos Pinto confesó el doble infanticidio de Cesar y Daniel (de 2 y 4 años de edad), se sometió a un proceso abreviado y fue condenado a 30 años de prisión sin derecho a indulto. También fue sentenciado a 15 años de cárcel por intento de feminicidio, pero según explicó la abogada Heidy Gil, esta no se toma en cuenta porque la legislación de Bolivia no permite la sumatoria de penas.
El pasado viernes, César Tezanos fue trasladado al penal de Chonchocoro desde el hospital de El Alto y, según protocolo, pasará por lo menos dos meses en el sector de aislamiento.