Cibercrimen: dictan 180 días de prisión preventiva para ocho de los 10 implicados
La justicia de Santa Cruz determinó enviar a ocho de los 10 aprehendidos por el caso de ciberestafas, a la cárcel de Palmasola por 180 días mientras dure la investigación; los otros dos implicados restantes tienen medidas sustitutivas.
La banda delictiva, conformada por varones y mujeres de distintas nacionalidades, llegó ayer a las puertas del Palacio de Justicia en Santa Cruz de la Sierra, para afrontar la audiencia cautelar con una duración de casi 6 horas. La misma fue suspendida el pasado viernes por no contar con un traductor para uno de los acusados de nacionalidad china.
Banda criminal
La Fiscalía, en la audiencia de medidas cautelares, señaló que el ciudadano asiático, Lei Z. es el cabecilla de los ciberextorsionadores, seguido del colombiano Miguel A. F. y los peruanos Gianella M. M. L., Luis A. F. S. y Franco R. A ellos se suman, los bolivianos Marcelo T. M., Percy R. D. y Fiorela S. V.
Todos son investigados por la comisión de los presuntos delitos de enriquecimiento ilícito con afectación al Estado y favorecimiento al enriquecimiento ilícito. Los presuntos autores fueron detenidos desde que el pasado miércoles en medio de un operativo policial a una empresa que operaba desde la zona de Equipetrol, tras una denuncia de una red de estafadores en línea que dejó a varias víctimas fuera del país. Según la investigación, esta misma banda se dedicaba a extorsionar a personas de México, Ecuador, Perú y Chile.
Modus operandi
Las autoridades policiales mencionaron que esta red criminal proporcionaba préstamos inmediatos de dinero con intereses entre 30% a 40%; sin embargo, al momento del cobro ejercían amenazas como asesinar a los deudores o a sus familiares.
En primera instancia, fueron aprehendidas 118 personas que se encontraban en el establecimiento. Sin embargo, tras investigaciones se determinó liberar a 108, ya que muchos de ellos eran jóvenes que buscaron trabajo por un sueldo mínimo de Bs 2.200, más una comisión por los cobros que hacían.
El fiscal Cándido Blanco informó a Red Uno que se trata de una “empresa fachada” que contaba con Bs 70 mil de capital, sin embargo, tenía un movimiento mensual de Bs 400 mil. Se contactaban con alrededor de 1080 personas por día, entre a las que ofrecían sus servicios y quienes ya adeudaban los mismos, además de tener en su poder centenares de chips de empresas telefónicas para realizar su modus operandi.
El comandante General de la Policía, Álvaro Álvarez, mencionó en conferencia de prensa que uno de los aspectos con el que se logró la desarticulación de la banda, a parte de una investigación con la policía cibernética, fue el operativo de agentes encubiertos de la policía boliviana en esta empresa.