Aprehenden a tiktoker acusado de racismo y será trasladado a Potosí
Rubén Blanco, tiktoker alteño que fue denunciado por el delito de incitación al racismo y discriminación, fue aprehendido este miércoles en El Alto y será trasladado en las siguientes horas a la ciudad de Potosí, donde debe declarar ante la Fiscalía.
Blanco afirmó que no tenía recursos económicos para viajar a Potosí y, por eso, no se había presentado a la comparecencia ordenada por el Ministerio Público, en semanas pasadas, y se había conformado con dar disculpas públicas por las reiteradas veces en las que se había referido de forma despectiva a la danza “los mineritos”.
El tiktoker calificó a esta expresión cultural como “sucia y mugrosa”. Cuando sus palabras se hicieron virales y conoció que la Gobernación de Potosí le había entablado la demanda penal, ratificó sus palabras y se burló de las autoridades. “Todos los que han hablado de mí, a los que me demandan, son unos campesinos”, afirmó con sorna.
Recién, cuando fue notificado en primera instancia con la denuncia en su contra, se retractó y pidió disculpas a la gente que se había sentido ofendida, pero no fue suficiente para detener el proceso en su contra.
“Esta mañana fue aprehendido. Está en instalaciones de la Felcc (Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen). Estamos alistando para trasladarlo a Potosí”, confirmó al diario La Razón la presidenta de Derechos Humanos de El Alto, Virginia Ugarte.
Este caso ha tenido amplia repercusión en redes sociales, entre los que consideran que una demanda penal en su contra es exagerada y los que señalan que se debe dar una sanción ejemplar para evitar declaraciones que denigren las distintas expresiones culturales del país.
La danza de los mineritos fue declarada como Patrimonio Cultural Inmaterial de Bolivia, en septiembre de 2022. Fue creada en 1942, en el pueblo de Ocuri, en el norte de Potosí, luego se extendió hasta Uncía y, en los años siguientes, a distintos departamentos del país, brillando en distintas entradas folclóricas.
“La danza representa al minero boliviano que acompañado de la palliri bailan al ritmo de huayño lento con pasos que se asemejan a la actividad cotidiana en los socavones”, se señala en la ley que la declara patrimonio. Se agrega que, además, “representa el sufrimiento, dolor, alegría” de los trabajadores mineros en la colonia y en la actualidad.