La última víctima de Pucamayu sufrió excesiva violencia y estaba en el cuartel
La autopsia realizada a Cristian Cruz Zerna, de 18 años, que fue secuestrado junto a otras cuatro personas, torturado y presumiblemente sepultado vivo por comunarios de Pucamayu, reveló que falleció a causa de “una excesiva violencia”.
El fiscal departamental de Cochabamba, Osvaldo Tejerina, informó ayer que Cristian murió por una anoxia (falta total de oxígeno), obstrucción de orificios respiratorios y asfixia por sofocación. Además, indicó que el cadáver presenta policontusiones en todo el cuerpo (hematomas).
“Según la revisión del cadáver, se observa una violencia excesiva como causa de la muerte (…) Se observa rastros de cinta masking (plástica) alrededor del cuello, ataduras en las manos y se advierte rastros de plástico alrededor de la cabeza”, detalló Tejerina.
Además, reiteró que a la fecha existe una sola persona detenida preventivamente por el delito de secuestro y que se le ampliará la imputación por asesinato.
“La responsabilidad no sólo es del autor material, sino también de los encubridores, instigadores y de aquellos que ocultan elementos probatorios”, añadió.
En cuanto a la participación de dirigentes y autoridades, el fiscal adelantó que serán citados como testigos.
Conscripto
Ayer, la madre de Cristian, al momento de retirar el cadáver de su hijo del Instituto de Investigaciones Forenses (IDIF), dijo que no era excadete de las Fuerzas Armadas.
“No es como dicen, mi hijo estaba en el cuartel en el CITE (Centro de Instrucción de Tropas Especiales), él tenía 18 años y el año pasado salió bachiller. Ahora, de su círculo de amistad no sé nada”, sostuvo.
El cuerpo de Cristian fue trasladado al municipio de Punata, donde se realizó una misa y luego se lo sepultó en el Cementerio General de Paracaya.
Observaciones
Según Eddy Ordoñez, abogado de la familia Loroña Mendoza, los hermanos Thadhashy y Auristela Liza Loroña Mendoza, y de Trinidad Muñoz Pardo y Juan Carlos Román Medina sufrieron torturas y golpes, lo que contradice la versión de Ernesto Almaraz, el presunto autor confeso del macabro asesinato múltiple.
“El testimonio de Almaraz tiene la finalidad de encubrir a alguien (…) En la comunidad hay un pacto de silencio, nadie quiere hablar del hecho. La supuesta venta de armas viene del presunto autor del hecho. La única verdad es que Thadhashy, su esposa y su hermana, además de Juan Carlos, estuvieron en el lugar y en el momento equivocado”, sostuvo Ordoñez.
Se presume que los presuntos autores del secuestro y asesinato se esconden en el trópico de Cochabamba, de acuerdo a los informes de la Policía.