Bayern emplea su esfuerzo al límite para superar a Sevilla
Bayern de Múnich tuvo que emplearse al límite y llegar hasta la prórroga para adjudicarse la Supercopa de Europa (2-1), la segunda que consigue en su historia y que le confirma como el mejor del continente, ante un Sevilla bravo, sin complejos y que hizo que el conjunto alemán tuviera que sacar todos sus recursos para superarle.
Los sevillistas, que ganaron la primera de las seis Supercopas de Europa que jugaron —2006 al Barcelona (0-3)—, perdieron otra oportunidad en un partido que empezaron ganando con el tanto de Lucas Ocamos, de penalti, y que con el 1-1 tuvieron alguna que otra para resolverlo, aunque la constancia y recursos alemanes dio frutos con el tanto de Javi Martínez en la prórroga (minuto 104), poco después de salir al campo.
En una de esas, Jesús Navas metió un balón en el área, el neerlandés Luuk de Jong la bajó para que se la quedara Rakitic y a éste le derribara el austríaco David Alaba, un penalti que no dudó en señalar el inglés Anthony Taylor y que el argentino Lucas Ocampos no perdonó para poner el 0-1 poco antes del cumplirse el primer cuarto de hora.
El meta marroquí Yassine Bono ya no pudo evitar que el asedio germano se tradujera en el empate a los 33 minutos, cuando el delantero polaco le dejó el balón muy fácil a Leon Goretzka y éste marcó.
El desgaste físico del equipo español fue evidente en la recta final del choque, pero también el alemán notó que había hecho un gran esfuerzo.
En-Nesyri, al inicio de este alargue, tuvo otra y se encontró con un palo en un partido ya abierto porque empezaba a verse el miedo a encajar y que eso fuera definitivo, como lo pareció cuando el español Javi Martínez, que había ingresado poco antes, vio la puerta tras un rechace de Bono (104’ PTE). Bayern es el rey de copas de Europa.