Ligas Europeas piden a UEFA aumentar al 10% el reparto solidario de ingresos
Las Ligas Profesionales Europeas pidieron a la UEFA y a las partes interesadas del fútbol un aumento sustancial, del 4% al 10%, del reparto solidario de los ingresos de las competiciones de clubes para los que no participan en estas para el ciclo 2024-2027.
Tras la Asamblea General celebrada este viernes en Praga, el colectivo de ligas aseguró, en un comunicado, que el aumento previsto de los ingresos de las competiciones de clubes de UEFA a 4.800 millones de euros por temporada "permite un aumento importante de la distribución, tanto para los clubes participantes como para los no participantes".
Las ligas señalaron que "reforzar el vínculo de los pagos de solidaridad, con proyectos específicos dedicados a la cantera y al desarrollo de talentos, permite a los clubes que sólo juegan en competiciones nacionales competir mejor sobre el terreno de juego y en el mercado de fichajes".
"Esto defenderá y protegerá el equilibrio competitivo tanto en las competiciones nacionales como en las internacionales", indicaron.
Según las ligas, estos pagos de solidaridad deben asignarse exclusivamente a los clubes profesionales no participantes en las competiciones de la UEFA, para ayudar a contrarrestar la distribución mucho mayor de los ingresos a los que sí participan, "compensando al mismo tiempo a los clubes por la enorme expansión de los partidos y las fechas de a partir de la temporada 2024-252.
Apoyo incondicional a la pirámide del fútbol europeo
La 46 Asamblea General de las Ligas Europeas acordó por unanimidad firmar una declaración conjunta, que apoya incondicionalmente la Pirámide del Fútbol Europeo e instó a todas las partes interesadas europeas a que ratifiquen estos principios.
Las ligas se comprometen con principios que consideran "sagrados" para el fútbol y que resumen en cinco puntos:
- Competiciones abiertas con ascenso y descenso solo a nivel de campeonato nacional.
- Un sistema de clasificación para las competiciones europeas basado en el mérito deportivo a través de la clasificación anual procedente de las competiciones nacionales.
- Un sistema de solidaridad justo y equilibrado que aspire a apoyar el desarrollo del deporte en sus niveles en sus niveles inferiores, que se basan en el entrenamiento, el desarrollo y la participación.
- Una estructura de buena gobernanza y diálogo que implique a las principales partes interesadas de la economía del fútbol para tener voz e impacto.
- Los órganos de gobierno (que combinan funciones normativas, comerciales y deportivas) son los más adecuados para implicarse de forma significativa y ofrecer un equilibrio justo para los intereses de las partes legítimas en los procesos de toma de decisiones europeos, en lugar de organizaciones con fines puramente lucrativos.
La declaración destaca que estos fundamentos son defendidos de forma unánime por la Comisión Europea, el Parlamento Europeo, el Consejo de la UE y la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, así como por gobiernos nacionales, instituciones públicas y las partes interesadas de todo el continente.
También asegura que "el fútbol europeo se ha mantenido sólido con firmeza a lo largo de su historia, incluso cuando ha pasado por desafíos y su propia evolución", lo que ha sido posible "gracias a su apertura y compromiso con la participación mayoritaria de toda la pirámide del fútbol".
"Esto significa proteger y preservar la economía del fútbol desde su base hasta la élite y mantener esos vínculos cruciales en todo su ecosistema. El fútbol es más que un negocio y mucho más que un bien de consumo. Es un beneficio social, sustentado por un enorme ecosistema que repercute en las comunidades y en la sociedad en general", agrega.
Sin mencionar expresamente a la Superliga, que está pendiente del fallo del Tribunal de Justicia de la Unión Europea, la declaración afirma que "el fútbol genera una economía que es socialmente responsable para la ciudadanía de toda Europa".
"No podemos permitir que el fútbol se debilite o se vea amenazado por tentaciones económicas a corto plazo ni por materializaciones de poder mundial. Cualquier intento de mostrar un objetivo similar por parte de entidades privadas es ilusorio", insiste.