El museo de Santa Teresa reabre sus puertas al público
Después de algunos cierres intermitentes a lo largo de los dos últimos años, este lunes volvió a abrir el Museo Convento de Santa Teresa que podrá visitarse de lunes a sábado, en varios horarios y bajo el cumplimiento de un protocolo de sanidad.
Lo que el público puede apreciar no sólo son los ambientes del convento, que fueron refaccionados en 2018, sino también varios cuadros y mobiliario que se exhiben; además del techo, la fachada, los revoques de las paredes, la recuperación de los pisos y escaleras, la restauración del pan de oro de los altares, entre otros objetos que recobraron vida.
El museo fue cerrado en mayo debido al incremento de casos positivos de Covid-19 en el departamento durante la segunda ola. Con la reapertura a las visitas, Jhonn Gonzáles, administrador del convento, explicó que no se puede ingresar a dos salas: el coro bajo y el templo, porque son espacios que las religiosas usan a diario y, precautelando su salud debido a que son mujeres mayores, prefieren evitar cualquier situación de riesgo.
El establecimiento se podrá recorrer en los siguientes horarios: de lunes a jueves de 9:00 a 11:00 y de 14:30 a 15:30; mientras que los viernes y sábados de 9:00 a 11:00 y el último horario es a las 14:00. Cada visitante deberá usar barbijo y se le tomará la temperatura antes de ingresar al museo. También tendrán la posibilidad de realizar la visita de forma individual o en grupos de siete personas que sean convivientes, entre otras medidas, y siempre respetando el distanciamiento social de dos metros, detalló Gonzáles.
La entrada tiene un costo de 15 bolivianos para turistas nacionales y 25 para extranjeros, el uso de cámaras dentro de las instalaciones tiene un costo extra de 25 bolivianos. Además, como es tradición, las hermanas carmelitas del convento ofrecen sus productos como mermeladas, vinos, velas, entre otros.
Gonzales anunció que con motivo de la celebración de la fiesta de la Virgen del Carmen se realizará una misa central este viernes, a las 10:00, con la presencia del obispo e invitados especiales. Informó también que el padre Armando Sejas asumió el cargo de director del convento tras el fallecimiento del padre Linton Guzmán.
Preservación de un patrimonio cultural
Las restauraciones continúan. Desde 2020, el convento viene realizando diferentes actividades virtuales y presenciales, con la colaboración de otras instituciones y organizaciones, para llevar adelante la restauración de los cuadros del museo.
Santa Teresa fue uno de los primeros monasterios en construirse en Cochabamba. Su edificación data de 1760 y tenía por objetivo albergar a las religiosas de la orden de las Carmelitas Descalzas que vivían en claustro. Cuenta con celdas o dormitorios, una sala capitular (lugar de reunión), un patio de rezos y procesiones, un locutorio, botica, tornos para comunicarse con el mundo exterior, un calvario o altar recubierto de láminas de oro, la iglesia, entre otros.
Este atractivo no sólo es de interés para el turista de arte sacro y religiosos, sino que es un lugar para profesionales que deseen aprender e investigar más sobre la recuperación de estructuras patrimoniales mediante el material documentado que existe del proceso de restauración. Son libros que registran toda la secuencia arquitectónica realizada durante los cinco años de trabajo y que es accesible para los interesados.
El convento y museo fueron declarados Patrimonio Nacional Monumental Histórico, Cultural y Arquitectónico en 2012. En 2018 estrenó su emblema azul, que formalizó su calidad de bien protegido, y una maqueta que permite apreciar mejor las características de esta edificación varias veces centenaria.