Protesta. Los ambientalistas siguen atacando las obras de arte
Un cuadro del pintor postimpresionista francés Henri de Toulose-Lautrec fue atacado con sangre falsa en la Alte National Galerie de Berlín sin que hasta el momento existan indicios de que el atentado haya sido perpetrado por activistas contra la crisis climática.
Según una portavoz de la Fundación Patrimonio Cultural Prusiano una mujer lanzó el líquido contra el cuadro y luego se pegó a la pared.
Hermann Patzinger, presidente de la Fundación Patrimonio Cultural Prusiano, se mostró “conmocionado por el ataque sin sentido al arte”.
“Hasta donde sabemos el cuadro no sufrió afortunadamente daños graves pero si ha habido daños en la sala de exposiciones. El líquido y el pegamento tienen que ser retirados de la pared”, dijo Patzinger.
Mientras tanto en el Museo de Historia Natural dos mujeres se adhirieron con pegamento a las barras que sostienen el esqueleto de un dinosaurio.
Las mujeres estaban vestidas con chalecos naranja y se pegaron a los postes de metal que sostienen el esqueleto del dinosaurio de más de 60 millones de años, con una pancarta que decía: “¿qué tal si el gobierno no lo tiene bajo control?”.
Una de las mujeres, Caris Connell, dijo estar asustada con “los incendios forestales, la escasez de agua, el hambre y la guerra”.
“Los dinosaurios acabaron porque no soportaron los cambios masivos del clima. Eso también nos amenaza”, agregó la activista de 34 años.
La otra manifestante, Solvig Schinkoethe, dijo que como madre de cuatro hijos, teme las consecuencias del cambio climático.
“Hemos escogido la resistencia pacífica para proteger a nuestros niños de la mortal ignorancia de los gobiernos”, comentó la mujer de 42 años.