Experimental. “Gerundio” se perfila como una investigación de género única y poderosa
Luego de casi tres años, la obra experimental “Gerundio” retorna este sábado. La performance explora desde lugares muy profundos el erotismo como poder femenino y pone sobre la mesa cuestionantes de cómo el público percibe su propio placer.
La iniciativa surgió del encuentro de dos investigaciones. La primera es la de Sofía Castro que estaba investigando sobre el movimiento, el placer, el erotismo y la meditación desde un lugar muy físico. La segunda es la de Malala Sanz, de inclinaciones sociológicas. Ella busca entender cómo se construye la idea de cuerpo en Bolivia, y desde ahí, cómo se construye la idea de sexualidad y el género. Sanz es ahora la directora del proyecto.
“E s una experiencia escénica porque no es una pieza convencional de danza contemporánea, sino una obra que se va modificando continuamente, tras ser habitada por diferentes personas que contribuyen con sus experiencias”, dijo Sanz. En ese sentido, Castro y Bianca Shallow ayudaron a construir las estéticas de la propuesta.
La obra comienza con una meditación sobre el suelo pélvico que provoca placer en los cuerpos de las performers. Esto se hace diez minutos antes de que entre el público al auditorio. A partir de allí, se explora desde el placer propio hasta transformarlo en colectivo. En ese punto, la directora explica que “se invita al público a que entre en la experiencia desde lo sensorial, proponiendo diferentes placeres no simplemente el placer de ver lo que ocurre en escena, sino de conjugar con algunos sentidos, como el gusto el olfato y la vista”.
Sanz explicó que el nombre se debe a una suerte de atemporalidad. El nombre surge de la idea de que el género, la sexualidad y la misma autopercepción pueden ser conceptos que fluyen sobre los cánones establecidos o permiten aceptar otras posibilidades. Cuando Sanz unió este concepto con el de Castro, surgió “Gerundio”, como el presente continuo de la vida misma.
Esta obra experimental fue presentada, en 2021, en el marco del Festival Danzénica. En esa oportunidad, el público recibió la propuesta de forma muy positiva. Esto fue una sorpresa para las responsables, ya que se temía lo contrario. Sanz también comenta que se intentó llevar la propuesta a la calle, pero no fue posible debido a lo provocativo de la misma. Luego de la primera experiencia, Sanz notó que la obra, al ser habitada por diferentes personas, nunca es la misma.
La obra se presentará este sábado 13 en la Casa Cultural ICrea. Se realizarán dos funciones: una a las 19:00 y otra a las 20:30.