Por tercera vez consecutiva se prevé otro fracaso en la elección de las principales autoridades judiciales de este 2023, que tiene como antecedentes los comicios de 2011 y 2017, en los que los votos nulos y blancos se impusieron. Para estos procesos, los reglamentos, periodos de postulación y ampliación de plazos, entre otros, fueron adecuados para que candidatos del oficialismo copen los cargos del sistema judicial.